_
_
_
_
_
Análisis:EL ACENTO
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

El libertino en la biblioteca

La Biblioteca Nacional de Francia ha comprado por siete millones de euros el manuscrito de Historia de mi vida, de Giacomo Casanova. Son 3.700 folios de letra apretada donde el célebre seductor cuenta sus andanzas. Fue espía, violinista, poeta, seminarista, militar, jugador, agente financiero, mago, alquimista, hizo sus pinitos como médico y participó en la creación de la Lotería Nacional francesa; pero, sobre todo, se dedicó a las mujeres, a seducirlas y a amarlas. Y a contar sus aventuras. Nacido en Venecia en 1825, viajó por toda Europa y conoció a algunos de los personajes más célebres de su tiempo. Murió pobre en una ciudad de Bohemia en 1798.

Fue hombre de mentalidad anclada en el antiguo régimen y no supo engancharse a los cambios que se avecinaban. Hijo de unos comediantes que llevaban de un lado a otro sus espectáculos, mantuvo intacta durante toda su vida su fascinación por la aristocracia, e hizo lo que pudo por formar parte de sus círculos.

No siempre con fortuna. El príncipe de Ligne, por ejemplo, que fue un consumado artista de la seducción, un valiente militar y un gran escritor, lo alojaba en su palacio pero advertía a sus criados de que no lo recibiría nunca. Para él, Casanova era de los que habían hecho del libertinaje una carrera (y eso "implica seguir al pie de la letra el hedonismo ramplón que lo anima", escribió), y lo despreciaba.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Acaso su leyenda había devorado ya entonces a Casanova, porque la narración de su vida va más allá de lo erótico (su hilo conductor) para convertirse en un imponente fresco de las costumbres de su época lleno de agudas observaciones. Empezó a contar su historia ya mayor, había perdido toda fama y era bibliotecario del conde de Waldstein, en Dux. Hay mucho de ficción en lo que se presenta como una historia real.

Siete millones de euros es mucho dinero para que la Biblioteca Nacional de Francia compre la obra de un veneciano, pero una empresa financiera ha asumido el patrocinio. Además, el texto lo escribió Casanova en francés. Aunque es posible que no sea el idioma en que está escrito lo que fascina a la Biblioteca sino el lenguaje universal de la seducción que encarna, como nadie, el personaje.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_