Muere el actor Paco Vidal, maestro de los papeles de reparto
El conocido intérprete de cine, televisión y teatro ha fallecido en Madrid a los 82 años
Si de algo puede estar orgulloso el cine y teatro españoles es de sus grandes actores de reparto, considerados, incluso internacionalmente, profesionales sobresalientes en su oficio. Uno de los más conocidos y admirados, José Francisco Vidal Bornay, ha fallecido este viernes en una clínica del centro de Madrid a la edad de 82 años a causa de una fibrosis pulmonar, diagnosticada hace algo más de un año. Nacido en Ibi (Alicante) en 1941 y criado en Ceuta, Vidal se trasladó muy joven a Madrid para estudiar Ciencias Políticas, pero el teatro se le cruzó por el camino cuando se le ocurrió asistir, tan solo por curiosidad, al Círculo Medina, donde el entonces actor y director Miguel Narros daba unas clases de interpretación. Pero Narros era mucho Narros y su capacidad docente y su manera de entusiasmar fueron durante décadas un gran influjo para mucha gente que se inclinaba por el oficio teatral, y entre ellos estaba Vidal, a quien muchas veces los amigos llamaban Paco Pepe y él reía con ese humor fino y delicado que poseía. Pero lo más destacado de su personalidad era su rigor a la hora de trabajar de manera casi extenuante, y que le valió la admiración de sus compañeros y un afecto que se ha puesto de relieve cuando se ha conocido su muerte.
Aquellas clases primeras en los años sesenta del pasado siglo derivaron en el Teatro Estudio de Madrid, donde Narros y William Layton, sobre todo este último, introdujeron en España el método Stanislavski. Aquel proyecto, que llegó a contar con un pequeña sala en el barrio de Chamberí bajo el nombre de TEI, derivó con los años en el famoso Laboratorio William Layton, un proyecto importante en el panorama del teatro en España y en el que Paco Vidal estuvo profundamente implicado hasta convertirse en un octogenario. Allí dio clases de interpretación durante décadas y montó muchos espectáculos en los que se involucraba o simplemente era el punto de apoyo y la muleta para muchos alumnos que recurrían a él.
Empezó a trabajar profesionalmente en 1970 y en su perfil profesional él mismo iba contando el tiempo que había dedicado al oficio de actor de cine, televisión y teatro, al de director escénico y también al de productor de montajes. Como actor, 53 años y 10 meses. Como director ,31 años y 10 meses, y este mismo tiempo como productor de teatro. Además era coach (entrenador personal).
Entre las series de televisión más populares en las que trabajó se encuentran Víctor Ros, Ángeles y demonios, Aída, Rescatando a Sara, El secreto de Puente Viejo, La señora, Amar es para siempre, 7 vidas, Al filo de la ley, El comisario, Cuéntame, Hermanas, Hermanos de leche, La Regenta, Farmacia de guardia o Brigada Central, sin olvidar las numerosas veces que participó en las siempre recordadas producciones teatrales de Estudio 1. En cine trabajó bajo las órdenes de directores como Guillermo del Toro, José Luis Cuerda, José Luis Garci, Francisco Regueiro, José María Carreño, Antonio Mercero, Juan Antonio Bardem y Angelino Fons.
Como actor de teatro llegó a estar cuatro años en la compañía estable del Teatro Nacional Español, donde fue uno de los actores fetiche de Miguel Narros. Los más importantes directores escénicos contaron con Paco Vidal para transitar por numerosos textos clásicos y contemporáneos
Como director de teatro, algo en lo que puso su habitual seriedad y rigor, lo que le valió un buen puñado de buenas críticas, montó sobre todo textos españoles y mayoritariamente de autores actuales. Entre ellos, José Ramón Fernández, Rodolf Sirera, Jardiel Poncela, Alfonso Sastre, Adolfo Marsillach, Carlos Arniches, Valle-Inclán, José Luis Alonso de Santos, Francisco Nieva y, sobre todo, Ignacio Amestoy, a quien también produjo unos cuantos montajes de su autoría, al igual que otros autores con los que ejerció de productor. Su última intervención actoral fue para la 67ª edición del Festival de Teatro de Mérida con el montaje de Mercado de amores, que tuvo que interrumpir por razones de salud. Entre sus dramaturgos internacionales preferidos estaban Noel Coward, Shakespeare, Koltés, Eduardo de Filippo, Tennessee Williams, Daniel Besse, Terence Rattigan, David Hare, Harold Pinter y Thomas Bernhard.
Paco Vidal mantuvo a lo largo de su vida una nada oculta pasión por el cine, fundamentalmente cine negro clásico. De hecho veía a menudo su película favorita, El tercer hombre de Carol Reed, y leía afanosamente a John Le Carré.
El cuerpo de Paco Vidal se encuentra en la sala ocho del Tanatorio Norte de Madrid, desde donde mañana saldrá a las ocho de la mañana para ser incinerado a las nueve en el Crematorio de Colmenar. Posteriormente serán trasladadas sus cenizas al cementerio de Ibi, donde están enterrados sus padres y hermana.
