El arte inspira al movimiento en Madrid en Danza 2021

Dos coreografías cercanas al teatro gestual e inspiradas por el arte clásico cierran el círculo de Madrid en Danza 2021. La irónica Graces, en la que la italiana Silvia Gribaudi hace referencia a los mitos y conceptos detrás de la escultura neoclásica, abre un festival que cierra la experimental Flowerheads, cuyo punto de partida es uno de los máximos reclamos del arte en Madrid, El jardín de las delicias de El Bosco. Esta 36 edición del ciclo se extiende desde este miércoles hasta el 30 de mayo en varios puntos de la ciudad, de Teatros del Canal y el Centro Cultural Pilar Miró al Mercado de Vallehermoso y la calle de Bravo Murillo, además de a otros 20 escenarios del resto de la región.

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Cuando amar a través de una pantalla deja de ser la excepción

A través de una visión irónica de la danza contemporánea, Gribaudi investiga desde este miércoles sobre los cánones occidentales de perfección y belleza en Graces. Para ello, apela sobre el escenario, rodeada de tres bailarines masculinos, a la escultura neoclásica de Las tres Gracias, que el italiano Antonio Canova creó entre 1812 y 1817 basándose en la mitología griega. Las tres hijas de Zeus que representaban la belleza, el encanto y la alegría, son en esta propuesta encarnadas por Siro Guglielmi, Matteo Marchesi y Andrea Rampazzo. “Es una forma de alejar el concepto de ‘gracia’ de los estereotipos de género, pero sin elaborar necesariamente un discurso feminista, sino universal”, comenta por teléfono la creadora de esta pieza de éxito internacional, días antes de su estreno madrileño.

Ella y sus acompañantes interpretan a su manera rutinas deliberadamente alejadas del canon y del virtuosismo mientras suenan composiciones de Vivaldi y Strauss y también las melodías modernas del dúo estadounidense de música electrónica Matmos. Es una forma de incidir en la imperfección técnica que la danza contemporánea ha revertido con respecto a la danza clásica “y también un modo de abrir el abanico de posibilidades del concepto de belleza, que en la actualidad es muy poco flexible. El camino a la felicidad pasa por aceptarse como uno es, así que ya va siendo hora de que todos, hombres y mujeres, iniciemos una pequeña revolución al respecto”, comenta Gribaudi. El humor al que recurre de forma habitual en sus creaciones no es un asunto ni banal ni sencillo, defiende ella misma, ya que “requiere de un balance muy preciso entre silencio, ritmo e improvisación que sirve para crear un diálogo con la audiencia presente”.

El enigma de una pintura

Un cuadro sirve de referente conceptual y estético a Flowerheads, el que es uno de los microespectáculos, de aproximadamente 15 minutos de duración, que cierran el domingo 30 de mayo la programación de este año de Madrid en Danza. Lo harán de forma gratuita y en plena calle, muy cerca de la sede principal del festival, los Teatros del Canal situado en la intersección de las calles de Cea Bermúdez y de Bravo Murillo. Su autor, Elías Aguirre, acostumbrado a buscar a lo largo del mundo escenarios poco frecuentes para la danza, se siente cómodo actuando en plena calle. “El tener que adaptase a un nueva espacio es una forma de que la propuesta no muera estancada”, defiende.

Esta creación da vida y movimiento al universo encerrado en la parte central del tríptico El jardín de las delicias, de El Bosco, una obra que une dos de las muchas pasiones del polifacético artista: la pintura y la naturaleza. El bailarín y coreógrafo, formado en Bellas Artes, ha perdido la cuenta de las veces que se ha plantado ante el cuadro del maestro flamenco situado en la sala 56 A del Museo del Prado, uno de los más visitados de la basta colección de la pinacoteca a lo largo de su historia. “Me fascina su capacidad de enigma y la forma que tiene de construir un imaginario propio, conectado con los placeres entendidos como algo efímero”, cuenta sobre la obra. Ha sido un mero detonante para concebir este proyecto a través de su compañía de danza, apoyada desde hace años por el Centro Coreográfico Canal de la Comunidad de Madrid.

Tres barrocos personajes que interpretan Mario González, Víctor Fernández y el propio Aguirre simbolizan en la teatral coreografía de danza urbana y contemporánea un ecosistema de inestable equilibrio. A través de sus movimientos “en ocasiones precipitados e inquietantes”, cobran vida insectos, flores, anfibios y peces, invocando esos deleites pasajeros a los que se refiere su autor y que “conectan con algo tan efímero como es la danza”, apunta.

Los floreados tocados de la diseñadora de vestuario Marisa Maggi sobre la cabeza de los tres bailarines ayudan a recrear el concepto de Flowerheads que, para terminar de componer ese ambiente entre lo onírico y lo biológico, se apoya en las melodías electrónicas del músico madrileño Ed is Dead creadas de forma expresa para esta coreografía.

Información. Apertura de Madrid en Danza: Graces. Cuándo: del 7 al 11 de abril. miércoles, jueves, viernes y sábado a las 18.30 horas; domingo a las 18:00 horas. Dónde: Sala Negra de los Teatros del Canal (calle de Cea Bermúdez, 1). Precio: 15 euros. /// Cierre de Madrid en Danza: Flowerheads. Cuándo: domingo 30 de mayo a partir de las 12.00 horas. Dónde: calle de Bravo Murillo, 49. Frente al Parque de Enrique Herreros de Madrid. Precio: evento de calle gratuito y abierto al público.