Juego sucio en las elecciones de la universidad pública del País Vasco

La carrera electoral a rector de la Universidad del País Vasco (UPV) ha saltado por los aires tras descubrirse que el vicerrector de Desarrollo Científico-Social y Transferencia, Guillermo Quindós, catedrático de Microbiología, utilizó una cuenta fantasma de X (antes Twitter) para publicar mensajes ofensivos e insultantes al candidato a máxima autoridad de la entidad Joxerramon Bengoetxea y a miembros de su equipo. Les descalificó con términos como “pijoflautas” o “abuelito dulce”, entre otros comentarios. Tras conocerse que Quindós ha sido el autor de estas ofensas, el profesor universitario ha presentado su renuncia al cargo de vicerrector y dimite también como integrante de la candidatura liderada por Eva Ferreira, actual rectora de la UPV. “Quiero expresar mis disculpas a ambas candidaturas”, ha escrito Quindós en X tras estallar la polémica y anunciar su marcha.

La identidad del docente dimitido se conoció el lunes después de que Bengoetxea denunciase la “falta de limpieza” en las elecciones a rector de la UPV. En una sesión extraordinaria del claustro para presentar los programas de los dos aspirantes, la candidatura de Bengoetxea advirtió de que un vicerrector del equipo de la actual rectora se estaba dedicando a “difamar” a su contrincante desde una cuenta fantasma (troll en el argot informático).

El descubrimiento lo ha realizado un “grupo independiente de personas que busca promover unas elecciones justas y transparentes en la universidad” pública vasca. Este equipo ha elaborado un informe de 11 páginas sobre “la autenticidad de la cuenta de X @atlasfantasma y el nombre “William Kabinda”, una identidad falsa que habría utilizado el vicerrector Quindós, que formaba parte de la lista de Ferreira, para atacar al candidato Bengoetxea.

William Kabinda publicó en la red social expresiones como las que siguen: “Con estos pijoflautas, mimados por sus papaítos, que se creen revolucionarios, pero jodiendo a los trabajadores y a la universidad pública, tenéis poco que hacer como no les apliquéis la normativa: sanciones, multas y trabajos sociales. Aunque, si trabajan igual se os lesionan!”. El informe incluye hasta seis pantallazos de publicaciones de este tenor. “El abuelito dulce (en apariencia), la comisaria política (la rubia que no te dejará moverte) y los perros de presa fascistas que disimuladamente les hacen el trabajo sucio (...) Joxerra, buena táctica, ¡pero acuérdate de Adolfo, Benito y Patxi el rana!”, indicaba en alusión a Bengoetxea y su equipo. Les llama “parásitos” y se refiere a algunos miembros de la candidatura rival como “falanges talibanas”.

Quindós ha rehusado aclarar a este diario su participación en los mensajes que han desatado la polémica. Dice estar dispuesto a hablar de ello después de que se celebren las elecciones en la UPV. “Ahora voy a volver a mi trabajo en Microbiología, que es mi deber y mi pasión”, comenta a EL PAÍS.

El vicerrector reaccionó de inmediato con la presentación de su renuncia el mismo lunes, y ese día publicó en la misma red social, pero ya con su identidad real, las siguientes explicaciones: “El motivo de la renuncia es la publicación en la redes de determinados mensajes”. Asegura que fueron escritos “en un contexto personal”, sin hacer uso de su nombre ni de su cargo universitario y “de alcance muy restringido. “De ningún modo aspiraban a tener un alcance público”, añade. “Eran comentarios que compartía con un número limitado de seguidores” (26 usuarios de X, según el estudio que los denuncia), expone Quindós en su cuenta verdadera, quien sostiene que en su ánimo no había “ninguna pretensión de incidir en la campaña electoral ni en la imagen de la otra candidatura”.

Quindós traslada sus “más sinceras disculpas a ambas candidaturas y, muy en especial, a Joxerramon Bengoetxea por el daño que estos mensajes hayan podido causar y que, en el contexto de una campaña electoral, son particularmente inaceptables”, reconoce el catedrático. Los estudiantes de Informática que elaboraron el informe rastrearon la cuenta de correo electrónico y el teléfono asociados a la cuenta fantasma, y llegaron a la conclusión de que pertenecían a Quindós. “Este hallazgo sugiere un posible intento de influir en el proceso electoral universitario y plantea ciertas dudas respecto a la transparencia de los mensajes publicados”, concluyen los autores del dossier.

Nada más conocerse que Quindós estaba detrás de los comentarios ofensivos, la actual rectora y candidata a la reelección decidió aceptar el mismo lunes por la tarde la renuncia “irrevocable” del integrante de su candidatura por escribir en las redes “mensajes que en modo alguno reflejan el espíritu y los valores de este equipo rectoral ni de la propia universidad”. “También quiero manifestar que, a título personal, me siento profundamente decepcionada. Desconocía estas acciones, que se han realizado de una forma estrictamente privada. No sólo el contenido de esos mensajes, también esa forma de proceder, me parecen completamente inaceptables”, señaló Ferreira.

Bengoetxea, por su parte, ha lamentado “los insultos por redes sociales y los rumores difundidos que hunden el fair play electoral” en una entrevista en Radio Euskadi. “Estos lamentables acontecimientos no nos intimidan, sino que nos sirven para reafirmarnos en la necesidad de nuestro proyecto transformador”, añadió.

La denuncia por estos hechos a cargo del grupo de Bengoetxea, formulada en un acto circunscrito al ámbito privado de la UPV, sin citar expresamente al protagonista de los mensajes ofensivos, y la posterior reacción inmediata de su contrincante Ferreira, dejando de inmediato fuera de su lista al autor de los mensajes, dejan al descubierto que ambos candidatos quieren poner a salvo el prestigio de la institución académica y desean que el debate y la discusión electoral discurran por cauces civilizados, mediante la discusión de programas y sin dañar el prestigio de la universidad, remarcan a este diario fuentes de ambas candidaturas.

La UPV elegirá el próximo 26 de noviembre al nuevo rector universitario, quien será proclamado el día 3 de diciembre. La universidad pública vasca cuenta en sus tres campus universitarios con 45.000 estudiantes y 5.600 docentes e investigadores. En las 20 facultades y escuelas ofrece este curso 100 grados y 108 másteres y 656 programas de doctorado.