‘Fierljeppen’, ‘surfboat’, ‘coasteering’ y otros deportes extremos para soltar adrenalina

Hace ya mucho tiempo que los deportes de aire libre se popularizaron y se convirtieron en una atracción turística más. Han ido creciendo tanto, ya sea en número de practicantes como en modalidades existentes, que hoy los más clásicos, como el senderismo, la escalada o el cicloturismo, u otros más arriesgados, como el puenting o el barranquismo, forman parte del catálogo de actividades de cualquier destino, igual que ir a ver un museo o una catedral. Lo que nunca imaginé es que entre los ya conocidos y los nuevos, entre las que son chaladuras de la peña a la que se le va la cabeza ideando disparates y otros que aparecen de la unión de dos o tres de ellos para pergeñar uno nuevo —casi siempre denominados con un palabro en inglés acabado en ing— se podían enumerar más de 350.

Ese es exactamente el número de deportes que aparecen recogidos, y perfectamente documentados, en 350 deportes que puedes practicar al aire libre, un nuevo título de Geo Planeta (octubre, 2023) escrito por Alfredo Merino, uno de los grandes fotoperiodistas de viajes y aventuras de España. Un tipo honesto y comprometido que solo escribe de lo que sabe y practica y que lleva toda una vida escalando montañas, participando en grandes expediciones y escribiendo artículos y reportajes sobre viajes, naturaleza y deportes de riesgo. El propio Merino me confesaba que incluso son más de 350 y que había dejado fuera otras 70 disciplinas para que no se hiciera más extenso aún.

El libro es prolijo en detalles de cada uno de ellos y aborda no solo el qué es y cómo se practica ese deporte, sino también sus orígenes y su historia. A modo de aperitivo, estos son 10 de los más raros u originales que se pueden encontrar entre sus páginas.

Caniscoot

Se trata de un deporte de tiro con perros, pero que se practica sobre tierra, no sobre superficies heladas. Y el musher —conductor— va sobre un patinete o una bici de pie. Estas bicicletas, llamadas también pediciclos, llevan ruedas similares a las de las bicicletas, pero por en medio no hay un cuadro y un sillín, sino una plataforma tipo patinete en la que el conductor maneja de pie, con un manillar y dos frenos. Se le acopla un tiro de tres perros con una línea de cuerda unida al vehículo a través de un muelle. Este muelle sirve para disipar por completo los tirones y cambios de dirección que la línea de perros envía al vehículo.

Psicobloc

Tras este pomposo palabro se esconde una modalidad de la escalada en libre y en solitario, es decir, sin cuerda de seguridad de ningún tipo ni otra medida que evite una caída. Se hace en paredes de acantilados con aguas profundas. De esta manera, el escalador, que como digo no va sujeto a nada, si falla y cae lo hace directamente al agua, que es la que amortigua supuestamente el golpe.

Vuelo-vivac

Una vez más, de la unión de dos deportes de aire libre tradicionales surge uno nuevo. En este caso se trata de mezclar las travesías de alta montaña con vuelos en parapente para avanzar más kilómetros. Es una disciplina bastante exigente y arriesgada porque tienes que tener mucha pericia en el manejo del parapente y mucha en la supervivencia y progresión en alta montaña. Además de tener una excelente forma física, porque hay que ascender y crestear —acción de andar o correr a lo largo de una cresta— por lugares complejos con una carga enorme: el parapente, el equipo que necesites para la alta montaña (que puede incluir esquí, crampones y piolet en invierno), agua y comida suficientes y lo necesario para vivaquear (saco de dormir, colchoneta y ropa adecuada). Además a ello se suma que hay que tener un gran conocimiento y planificación de la ruta a realizar, ya que los aterrizajes en esas zonas de alta montaña pueden ser comprometidos o incluso terminar tomando tierra en un sitio no deseado o peligroso. En 2014, un estadounidense hizo una travesía en vuelo-vivac de 1.200 kilómetros durante 18 días atravesando todas las Montañas Rocosas, caminando en unos tramos, volando en otros y durmiendo siempre al raso.

Fierljeppen

Versión neerlandesa del salto canario, esta modalidad de nombre enrevesado consiste, en realidad, en salvar canales de agua mediante una larga pértiga de hasta 13,25 metros de largo, fabricada con fibra de carbono. Igual que hacían los pastores canarios para salvar barrancos, pero ellos con una vara de pino de unos cuatro metros. Su historia se remonta ya al siglo XVI en los Países Bajos, donde se usaba para sortear canales naturales de agua. Ahora se ha convertido en una disciplina deportiva con campeonatos anuales en los que se compite en canales exclusivos construidos para este deporte. El récord masculino está en 22,21 metros y el femenino, en 18,19 metros. Teniendo en cuenta que para salvar esa longitud los saltadores se elevan una cantidad de metros casi similar, se entiende que sea considerado deporte de riesgo.

Surfboat

Una modalidad de surf que empezó a practicarse en Australia allá por 1908. Se utiliza una embarcación con cuatro remos fijados a las bordas y con una tripulación de cuatro remeros más un timonel que dirige desde la popa. Se trata sencillamente de cruzar trenes de olas lo más directo y rápido posible. El origen de este deporte está en los equipos de socorristas que tenían que salvar el oleaje para llegar al accidentado. Con la aparición de los barcos a motor y de las motos de agua esta manera de socorrer a alguien quedó en desuso, pero continuó siendo muy popular como deporte. Tanto que se ha extendido también a Nueva Zelanda, Estados Unidos y algunas zonas del norte de Europa.

Skandalopetra

Es la única versión de la inmersión en apnea que se practica en equipo y es heredera del trabajo de recolección de esponjas que históricamente se hacía en muchas zonas del Mediterráneo, pero en especial en la antigua Grecia. Aquellos recolectores de esponjas se sumergían atados a una piedra como lastre. Por eso, los modernos practicantes de skandalopetra lo hacen también atados a una cuerda al final de la cual pende una losa de granito o mármol de entre seis y 14 kilos de peso. De ahí el nombre de este nuevo deporte, ya que petra, en griego, es piedra. Emulando también a los originarios buscadores, el equipo está formado por dos personas. Uno es el que se sumerge atado al peso; las normas obligan a no usar ni aletas ni neopreno ni otro elemento que no sean unas gafas de bucear y unas pinzas nasales. El segundo miembro del equipo está en la embarcación y su misión —importantísima y crucial para la vida del que se sumerge— es tirar de la cuerda y sacarlo tan rápido como pueda una vez que este haya tocado fondo. Se practica bastante en la costa griega, donde se ha convertido en una atracción turística más. El récord está en 107 metros de profundidad.

Ice skimbat

Consiste en deslizarse sobre superficies heladas (lagos, ríos o llanuras) ayudado por unas alas skimbat (alas de murciélago), un artilugio de reciente creación pero que está revolucionando todos los deportes de deslizamiento, ya sea sobre agua, nieve, hielo o cualquier otra superficie. Las skimbat son unas alas inflables, a mitad de camino entre las velas de windsurf y las cometas de arrastre, que no llevan largas líneas de cuerda para sujetarlas y operarlas, sino que se agarran directamente con las manos a la botavara central. Esto hace que sean más ligeras, más cómodas de transportar, más baratas y más ágiles que las tradicionales.

Snow kayak

Puestos a idear el más difícil, o más raro todavía, a alguien se le ocurrió… ¡Lanzarse en kayak de aguas bravas sobre laderas nevadas! Al parto se le llamó snow kayak y, como es fácil deducir por su nombre, se trata de deslizarse por laderas heladas, en vez de con esquís, a bordo de los mismos botes de aguas bravas y con las mismas técnicas que se utilizan en ríos caudalosos. Parece ser que el invento nació a manos de kayakistas de la zona de los Alpes que, ansiosos porque no podían practicar su deporte favorito en invierno, puesto que los ríos se helaban, decidieron probar tirándose con sus kayakes por pistas de esquí. El primer campeonato se celebró en los Alpes austriacos en 2002, y en 2007 ya hubo un primer Campeonato del Mundo de Snow kayak en Austria.

Coasteering

Un deporte tan nuevo y tan poco practicado que aún no tiene nombre en castellano. ¿Podría ser… costear? Básicamente, consiste en recorrer longitudinalmente tramos costeros con morfología muy variada, siempre lo más cerca posible del agua y usando todo tipo de técnicas. Es decir, combina la marcha a pie, la escalada, el barranquismo, las vías ferratas y la natación. No se trata de recorrer tranquilamente una senda costera, sino de ir en busca de los acantilados más salvajes para atravesarlos de extremo a extremo, sorteando todo tipo de obstáculos. Es de alto riesgo porque no prevé ninguna embarcación de apoyo ni ningún tipo de anclaje o cuerda de seguridad. Ante cada obstáculo, el deportista debe elegir la técnica más útil y más segura para sortearlo, incluyendo tramos a nado en zonas que pueden estar batidas por el oleaje.

Triciclos de derrape

Conocidos en inglés como drift trike, es un triciclo en el que el piloto va recostado y muy pegado al suelo, para bajar el centro de gravedad. Lleva dos neumáticos traseros con un recubrimiento de PVC de alta presión para que no ofrezca resistencia y facilite el derrape. Y por delante, un manillar y una rueda que se asemeja al de una bicicleta, pero de un diámetro considerablemente menor. Se utilizan para hacer descensos vertiginosos por carreteras en los que se maneja derrapando.

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