La producción de pan en España no recupera los niveles previos a la pandemia, pero sube la facturación por la inflación
El consumo de bollería crece notablemente en 2023 respecto al ejercicio anterior y registra sus mejores cifras en los últimos ocho años, según datos de Asemac
La industria del pan en España se mantiene a pesar de la inflación, mientras que la bollería cierra un 2023 de dulce. La producción de pan creció moderadamente el pasado año respecto a 2022 (+1,2%), pasando de 723.896 miles de kilos de pan a 754.818 miles de kilos. Este dato mejora notablemente en cuanto a la facturación respecto al ejercicio anterior (+10,17%), desde los 988.861 miles de euros a los 1.089.428 miles de euros, según datos presentados este martes por la Asociación Española de la Industria de la Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac).
La nota positiva de 2023 la ha protagonizado la bollería. Se produjo un 7% más de este producto en 2023 respecto al año anterior y la facturación aumentó un 18,33%, pasando de los 672.279 miles de euros a 795.501 miles de euros en comparación al ejercicio anterior.
En general, las cifras de producción de panadería, bollería y pastelería, la producción del 2023 con respecto al ejercicio anterior ha tenido un significante aumento del 2,45% llegando a los 973.034 miles de kilos. Mientras que la facturación aumentó un 13,47%, hasta ingresar 1.884.928 miles de euros.
La inflación y el elevado coste de las materias primas ha hecho que la producción de pan sea cada vez más cara, es uno de los motivos por los que el consumo de este producto en los hogares descendiera un 1% en 2023, una tendencia que se ha moderado pero sigue a la baja porque en el 2022 bajó un 7%.
Si bien, por ese efecto de la inflación, a pesar de que se consume menos pan en los hogares de España, las familias destinaron en 2023 más dinero para comprar este alimento. En 2023 se observó un aumento del gasto en estos productos un 14,5% respecto a 2022, mientras que en ese año se registró una caída del 10,5% en comparación a 2021, según el informe de Asemac.
Pese a lo buenos datos, la industria del pan no se ha recuperado de la pandemia, cuando se horneaban 757.302 kilos de pan, casi 2.500 kilos más que en 2023 y la inflación ha provocado que se facture casi 241.060 euros más, con lo que los ingresos aumentaron un 22%. “Aun con todo, el comportamiento del sector ha sido razonablemente positivo. La parte negativa es que el consumo de pan en el hogar se reduce y no sabemos cómo revertir estas preocupantes cifras”, ha señalado en la presentación Jorge de Saja, secretario general de Asemac.
Las altas temperaturas provocaron que agosto fuera el mes de 2023 en el que menos producción de pan hubo (97.679,87 kilos), por lo que fue el periodo donde menos dinero se facturó (256,466,20 euros). En cambio, marzo fue el mes en el que más pan se horneó (118.892,21 kilos) y también cuando más se facturó (311.127,25 euros).
A pesar de que en líneas generales se consuma menos pan en España, el sector asegura que la calidad de este producto es cada vez mayor y los consumidores exigen que sea más artesanal y menos industrial. “Creo que el pan que se está vendiendo hoy es de mejor calidad que en el 2018″, señala el director general de Alimentación, José Miguel Herrero. Además, De Saja señala que los productores de pan cada vez están haciendo un producto mejor, “incluso han llegado a ganar premios internacionales”.
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