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Primero de Mayo: Los sindicatos salen a la calle para reclamar la subida de los salarios ante el repunte de la inflación

Las celebraciones por el Día de los Trabajadores recorren el país para reclamar el desbloqueo de la negociación colectiva

Los secretarios generales de UGT y  CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, en la presentación de los actos para la celebración del Primero de Mayo.
Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, en la presentación de los actos para la celebración del Primero de Mayo.Carlos Luján (Europa Press)
Gorka R. Pérez

Las celebraciones por el Primero de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores, se reproducirán este lunes por todo el país a través de distintas manifestaciones en las que los sindicatos convocantes, UGT y CC OO, exigirán nuevamente al empresariado una revalorización de los salarios que permita combatir el auge de los precios. El lema elegido por las centrales mayoritarias (CSIF ha declinado participar) en esta ocasión será “subir salarios, bajar precios, repartir salarios”, una vuelta más a la consigna del año pasado, “salario o conflicto”. La marcha principal, en la que estarán presentes los secretarios generales de ambos sindicatos, Pepe Álvarez y Unai Sordo, tendrá lugar en las calles de Madrid, y comenzará a las 12 del mediodía. El recorrido comenzará en la Gran Vía y llegará hasta la Plaza de España, donde está previsto que tanto los dos líderes sindicales como las máximas responsables de ambas organizaciones en la capital, Marina Prieto (UGT) y Paloma López (CC OO), hagan sendas intervenciones.

“Para garantizar que la economía española siga creciendo es fundamental una recuperación de los salarios en 2023, y a eso es a lo que estamos instando a las organizaciones empresariales. Ese va a ser el gran mensaje de este Primero de Mayo. Hay que subir los salarios, hay recuperar poder adquisitivo y hay que denunciar la actitud de [la patronal] CEOE de bloqueo del Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). O hay un acuerdo en este sentido o vamos a dar marcha a un inicio de movilizaciones que alcanzarán su culmen en otoño”, advirtió días antes de la celebración de las marchas Unai Sordo. “Los conflictos sabemos cómo empiezan, pero nunca cómo acaban, ni siquiera los que convocamos”, se sumó Pepe Álvarez, quién reclamó una asistencia mayoritaria para hacer sentir a las patronales “el aliento de la mayoría”.

Frente a estas reclamaciones sindicales, los empresarios advirtieron del peligro de caldear demasiado el ambiente. “Cuidado con coger la senda equivocada. Se ha trabajado mucho en los últimos años para tener la paz social que tenemos”, respondió Gerardo Cuerva, presidente de la patronal de las pymes (Cepyme), durante el 45 aniversario de esta organización enmarcada dentro de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).

Líneas rojas

A pesar de las distintas reuniones y los múltiples contactos que sindicatos y empresarios han mantenido en los últimos meses para abordar la renovación del AENC —una hoja de ruta que tutoriza la subida salarial, aun no teniendo carácter vinculante— las negociaciones siguen bloqueadas. Durante el último encuentro, hace un mes, CC OO y UGT plantearon a las patronales (CEOE y Cepyme) un incremento mínimo del 13,84% en el periodo de 2022 a 2024, empezando por un 5% para el año pasado, un 4,5% para este y un 3,75% para el próximo. Al mismo tiempo, también reclamaron una cláusula de recuperación salarial que opere al cierre de cada uno de los años. Los empresarios descartaron todas esas peticiones.

El Primero de Mayo llega este año después de que en los días previos se hayan publicado varios datos importantes acerca de la situación del país. Por un lado, la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el INE concluyó que en el primer trimestre de 2023 el paro aumentó en 103.800 personas respecto al último trimestre de 2022, al mismo tiempo que el empleo creció en 368.000 trabajadores, la mejor cifra registrada en un primer trimestre desde 2008. Y mientras, la inflación ha repuntado en abril al 4,1%, ocho décimas más que en marzo.

El crecimiento del IPC a consecuencia de los cuellos de botella de la pandemia y la guerra de Ucrania ha mermado paulatinamente el poder adquisitivo de los salarios. La OCDE calcula que los sueldos perdieron el año pasado en España un 5,3% de valor real, el noveno porcentaje más alto entre los 38 países de este organismo.

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Sobre la firma

Gorka R. Pérez
Es redactor de la sección de Economía y está especializado en temas laborales. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Antes trabajó en Cadena Ser. Es licenciado en Periodismo por la Universidad del País Vasco y Máster en Información Económica de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

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