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SEGURIDAD ALIMENTARIA

Los comercios retiran urgentemente el aceite de orujo de oliva

Las organizaciones de consumidores, divididas ante la inmovilización ordenada por Sanidad

Un portavoz de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) aseguró que a primera hora de la tarde de ayer se había iniciado la retirada de las estanterías de las botellas de aceite de orujo refinado de oliva y de aceite de orujo de oliva. 'Hemos actuado en cuanto nos ha llegado la alerta', aseguró. ANGED agrupa a grandes cadenas como El Corte Inglés, Eroski, Carrefour y Alcampo. Sin embargo, en algunas páginas de Internet de los almacenes preparadas para hacer la compra on line, a media tarde aún era posible adquirir aceite de orujo, informa Mabel Galaz.

La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS) también informó de la retirada de las botellas sospechosas en las estanterías de los establecimientos asociados, informa Efe. Entre los miembros de esta entidad figuran las cadenas Ahorramás, Caprabo, Mercadona, Superdiplo, Alcosto y algunas ccentrales de compra como Ifa Española o Euromadi Ibérica.

Por otra parte, la decisión de Sanidad provocó dispararidad de opiniones entre los consumidores. El portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), José María Múgica, mostró su preocupación por la decisión del Ministerio de Sanidad de retirar del mercado todo el aceite de orujo de oliva.

Perjuicio a los fabricantes

A juicio de Múgica, la medida ministerial demuestra que el ministerio no ha sido capaz de aislar la partida de aceite contaminada con residuos de benzopireno y 'perjudica a los fabricantes que tienen un buen producto en el mercado'. 'En caso de que haya dudas hay que valorar que se retire todo el aceite, pero la decisión demuestra que la partida contaminada no ha sido localizada', afirmó.

Múgica, que participó en un curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander, aseguró que la decisión de Sanidad supone 'llevar el principio de precaución a una situación límite'. En su opinión la medida 'transmite al consumidor la impresión de que no se conoce el alcance real del problema ni cómo evitarlo'. Precisó que si la presencia de residuos peligrosos para el consumo humano sólo afecta a una partida, 'como todo apunta a pensar', el ministerio debería ser capaz de informar a los consumidores sobre cómo identificar el aceite contaminado y cómo actuar ante el producto.

Respecto a la decisión del Gobierno de redactar en los próximos días una norma sobre los ingredientes permitidos en todo tipo de aceites, Múgica señaló que 'no se puede sacar una norma cada vez que hay un problema' y concluyó que 'es mucho más importante que al consumidor le llegue una información coherente y creíble' sobre los productos que compra.

'Confiamos en que la decisión sea justificada, porque si no, resultaría indignante haber creado tal alarma', aseguraron en la Confederación de Amas de Casa y Usuarios, CEACCU. Por otro lado, el portavoz de la Unión de Consumidores y Usuarios (UCE), Enrique García, se mostró partidario de la inmovilización inmediata del aceite sospechoso, siguiendo el principio de precaución. 'Pedimos a los usuarios que no lo consuman y que revisen las etiquetas. Solicitamos a la industria que coopere en la retirada de ese aceite y que facilite a los consumidores el cambio de las botellas sospechosas', dijo. 'No se puede comparar esto con el problema del aceite de colza, pero confirma la puesta en cuestión de la seguridad alimentaria y los peligros de la industrialización', concluyó García.

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