_
_
_
_
_

'La Voz de Galicia' se asoma al exterior

La supresión de editoriales es el único cambio visible adoptado por los nuevos dueños de 'Diario 16'

En torno a la festividad de Reyes, La Voz de Galicia modificó la mancheta de su cabecera por segunda vez en pocos meses. El trajín muestra la situación interna con que vive su expansión la editora de este diario familiar y coruñés, bandera de 116 años de periodismo. La Voz se ha incorporado a la vanguardia de las tecnologías de la comunicación y, hegemónica en el mercado gallego, quiere abrirse paso fuera.

Diario 16 es su último salto. Una operación de relevo muy ajustada ha permitido mantener este periódico en la calle sin interrupción, y sin que sus directivos tengan interés en explicar para qué se han gastado más de 500 millones de pesetas en hacerse con el mismo en subasta judicial. Sólo dicen que era una buena oportunidad para disponer de una cabecera nacional y piden tiempo para concretar la voluntad de hacer "un producto muy profesional". El único cambio llamativo consiste en la desaparición de los artículos editoriales, estilo en el que siguen las costumbres de La Voz de Galicia, que tampoco cultiva dicho género periodístico.

El proceso iniciado para asomarse al exterior coincide con el relevo generacional en los primeros cargos ejecutivos del Grupo Voz. Hace 20 años, en La Voz de Galicia trabajaban apenas 80 personas. Santiago Rey Fernández-Latorre, a la sazón consejero delegado de la empresa, comenzó entonces a operar su transformación hacia una empresa multimedia. Hoy forman el Grupo Voz una veintena de sociedades que operan en distintos campos, con 1.050 empleados en nómina.

El núcleo sigue estando en el periódico gallego, al que corresponde casi la mitad de la plantilla. El año pasado realizó una tirada media de 131.500 ejemplares diarios. Con cuadernillos o páginas específicas, da cobertura a todas las comarcas de Galicia en 15 ediciones. De los más de 11.000 millones de pesetas que el grupo facturó el año pasado, 8.800 correspondieron al periódico.

La empresa es dueña también de Diario de León y La Voz de Baleares. A ello hay que añadir las 26 emisoras de Radio Voz, que su dirección está decidida a aumentar con el reparto por las comunidades autónomas de 350 nuevas emisoras locales de frecuencia modulada; precisamente está previsto que Galicia adjudique las 46 primeras de ese lote, puesto que el concurso correspondiente será fallado muy pronto. Un reciente acuerdo suscrito con la Compañía Telefónica sitúa al Grupo Voz, también, en la rampa de salida del futuro negocio del cable en la comunidad gallega.

Santiago Rey unió en su mano la propiedad, comprando las acciones a otros familiares, y sentó las bases de la expansión que ahora capitanean sus hijos Emilio y Santiago Rey Berguer. Construyeron la planta de impresión nueva en Sabón (A Coruña) con financiación de Caixa Galicia. Ello acarreó un endeudamiento importante.

Aunque La Voz no aspire a influir por medio de los editoriales, algunas de sus noticias levantan ampollas. En junio pasado, ese diario reveló parte de las ayudas encubiertas de la Xunta a la prensa gallega en 1996, 1.000 millones de pesetas, en una información en la que se afirmaba que otro periódico había sido subvencionado hasta con 44,8 pesetas por ejemplar, mientras La Voz sólo había recibido 5,7 pesetas. "No opinamos sobre las ayudas, sólo queremos transparencia y baremos objetivos en su concesión", afirma el hasta ahora director de La Voz, José Luis Gómez, nombrado recientemente director de publicaciones del grupo.

Otras fuentes creen, sin embargo, que La Voz facturó en torno a 2.000 millones de pesetas en1996 por distintos servicios multimedia a departamentos de la Xunta. Así lo publicó Tempos, una revista de carácter nacionalista. El director de publicaciones del Grupo Voz rehúsa comentar esos datos: "No son buenos, pero no voy a entrar en polémica", responde.

Poco después de que La Voz informara sobre las ayudas, la Xunta le concedió, en agosto último, una subvenciónque le permitió abaratar en 3,5 puntos un crédito de 4.550millones de pesetas negociado con un conjunto de entidades bancarias. El periódico informó de su intención de aplicar ese crédito a cancelar pasivo para liberar recursos y emprender nuevas actividades. La puja por la cabecera de Diario 16 se ha producido a los pocos meses de recibida esa financiación.

La editora de La Voz ha tropezado en Galicia con algunos significados barones del PP, pero cuenta, en cambio, con abiertas simpatías en el Gobierno, en Madrid, y en especial por parte de su portavoz, Miguel Angel Rodríguez.

Germán Castro, presidente del comité de empresa, considera "modélicas" las relaciones laborales en la editora de La Voz. Pero la inquietud también está extendida entre buena parte del personal: Radio Voz no ha respondido a las expectativas creadas -ha sufrido serias pérdidas económicas- y el diario La Voz de Baleares ha resultado un fiasco.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_