_
_
_
_
_
crítica | Apolo 10 1/2: una infancia espacial
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

‘Apolo 10 1/2: una infancia espacial’, el ‘Yo fui a EGB’ de Richard Linklater

El director de ‘Boyhood’ dirige una película de animación sobre el verano en el que hombre llegó a la Luna

Imagen de 'Apolo 10 1/2: una infancia espacial'
Elsa Fernández-Santos

Tras su viaje a la Antártida junto a Cate Blanchett en la fantástica e inclasificable Dónde estás, Bernadette, Richard Linklater se entrega a un festín de nostalgia en su nueva película, Apolo 10 1/2: una infancia espacial, un filme de animación estrenado en Netflix en el que el director de Boyhood sueña con regresar a la edad de la inocencia para volver a pisar la Luna.

Con su habitual encanto, Linklater recorre el verano de 1969 en un suburbio de Houston, donde la fantasía de un escolar se cruza con uno de los episodios de mayor euforia nacional de EE UU, aquel célebre “pequeño paso para el hombre, un gran paso para la humanidad” que Neil Armstrong pronunció un 21 de julio dejando sin habla a buena parte del planeta.

Para desplegar las alas de su memoria, el cineasta construye una película de animación llena de ritmo que mezcla las texturas del archivo, del vídeo casero a la televisión, con las del cine. Apolo 10 1/2 es una reconstrucción del pasado abonada a ese fetichismo nostálgico que en España trajo tantos beneficios a los creadores de Yo fui a EGB. Es decir, a una nostalgia servida a través de programas de televisión, canciones, juguetes, películas, discos, marcas y el resto de la exuberante memorabilia que construye la identidad de tantos boomers. Linklater tira de autobiografía y fantasía para mezclar el sabor de un helado con 2001, una odisea del espacio, la película de Stanley Kubrick que en 1968 imaginó el futuro; el póster de Raquel Welch en Hace un millón años con la guerra de Vietnam o la revista Playboy con Perdidos en el espacio, serie de televisión de la década de los sesenta sobre una familia de exploradores que navegaba a la deriva por las estrellas.

Excesivo en su recuento de objetos y recuerdos, Linklater acaba sucumbiendo a esa melancolía suya tan de domingo por la tarde y que vuelve a invocar en esta nueva película. Quizá Apolo 10 1/2: una infancia espacial tiene en sí mismo algo de juguete retro, como el LEM 200 de Congost, aquella luna de hojalata con su alunizaje y sus diminutos astronautas fabricada en España a principios de los setenta, pero con el eco que hoy perdura de las últimas palabras de Armstrong después de describir las huellas de sus botas en la fina arena de la Luna: “¡Hermoso, hermoso! ¡Qué magnífica desolación!”.

APOLO 10 1/2:  UNA INFANCIA ESPACIAL

Dirección: Richard Linklater.

Género: animación. Estados Unidos, 2022.

Plataforma: Nertlix.

Duración: 90 minutos. 

Estreno: 1 de abril.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Elsa Fernández-Santos
Crítica de cine en EL PAÍS y columnista en ICON y SModa. Durante 25 años fue periodista cultural, especializada en cine, en este periódico. Colaboradora del Archivo Lafuente, para el que ha comisariado exposiciones, y del programa de La2 'Historia de Nuestro Cine'. Escribió un libro-entrevista con Manolo Blahnik y el relato ilustrado ‘La bombilla’

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_