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Sátira social de Perú

En ‘Pecho Frío’ hay el mismo espíritu provocador e insolente de obras anteriores de Jaime Bayly

J. Ernesto Ayala-Dip

En la nueva novela del escritor peruano Jaime Bayly, Pecho Frío, el lector encontrará no pocos aspectos de su vida personal, suponiendo que los conociera. Así de novelesca es su biografía, que ha ido desgranando a través de todas sus novelas, hasta ahora, con tanta eficacia estética y sociológica. Los referentes literarios de Jaime Bayly están casi a la vista, entre ellos los de sus admirados Mario Vargas Llosa y Alfredo Bryce Echenique.

Quiero aclarar que Bayly no hace autoficción. Sólo utiliza retazos de su vida para poder así radiografiar con mayor precisión ética y política la vida de Perú. Bayly es un hombre de radio, televisión y prensa. Todo ello mucho antes de que descubriera el filón narrativo que su biografía le aportaría. Hijo de padres muy ricos, descendiente de apellidos importantes, con pedigrí social y renombrados banqueros de por medio. Informo de esto porque en Pecho Frío se airean estas cuestiones. Pecho Frío es el nombre del protagonista. A través de una irreprochable tercera persona, sabemos de las andanzas de Pecho Frío, de sus incursiones por el mundo de los banqueros, de la política peruana, de los márgenes de la sociedad, del mundo gay, de la corrupción, etcétera.

Pecho Frío es una desopilante sátira sobre el estado actual de la sociedad peruana. También lo es de sus instituciones políticas, de sus organizaciones públicas y privadas, de sus medios de comunicación, de su administración funcionarial. En tono y tratamiento, esta novela nos recuerda que Bayly está en plena forma narrativa. Encontramos en ella el mismo espíritu provocador e insolente de obras anteriores. Leo esta novela y me vienen a la mente la primera que publicó, No se lo digas a nadie (1994) y, sobre todo, la irreverente La noche es virgen (Premio Herralde, 1997). En Pecho Frío, adquiere entidad propia y destacada su lengua literaria. Los matices del habla, el popular y el no tan popular, la riqueza desternillante del idiolecto usado en los diálogos. En este sentido, este uso desenfadado (y casi diría lujurioso) de las voces, en consonancia con la magnitud desoladora de lo que se describe, es un elemento primordial en esta notable novela.

Pecho Frío. Jaime Bayly. Alfaguara, 2019. 336 páginas. 18,90 euros.

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