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Columna
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‘Los asesinatos del Valhalla’ y Luis Rubiales

Cuando se habla de realidad española, conviene no olvidar la tradicional querencia de la misma al sainete y al esperpento

Jenni Hermoso Luis Rubiales
Una protesta contra Luis Rubiales y en apoyo de Jenni Hermoso, este lunes 28 en la Plaza de Callao de Madrid.ISABEL INFANTES (REUTERS)
Ángel S. Harguindey

Hay semanas en las que los asesinatos son los reyes de la casa, en realidad de las casas: la de la realidad y la de la ficción. Hablamos de Los asesinatos del Valhalla y de Luis Rubiales. Y sin la menor duda hay que señalar que la realidad, en este caso española, supera con mucho la de la ficción. ¿Por qué?, porque cuando se habla de realidad española conviene no olvidar la tradicional querencia de la misma al sainete y al esperpento.

La semana del suspendido presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sido un filón informativo mundial que, al parecer, aún está lejos de acabar por esa especial afición del señor Rubiales, incluso de su madre, al melodrama. El suspendido presidente tuvo a bien aclarar a la televisiva audiencia que “aquí no se está tratando de ejercer justicia, sino de un asesinato social, se me está queriendo matar”, dramática confesión corroborada días después por su madre, encerrada en huelga de hambre en la Iglesia de la Divina Pastora de Motril en protesta por la “cacería, inhumana y sangrienta” que considera que se está haciendo con su hijo. Puro esperpento. Menos mal que Jorge Vilda, responsable de la selección femenina de fútbol, y Luis de la Fuente, seleccionador nacional del fútbol masculino, pasaron en 24 horas de aplaudir de pie al que se está queriendo matar a criticar “el comportamiento impropio” de Rubiales. Ya está aquí el sainete.

Mucho más coherentes son los islandeses de Los asesinatos del Valhalla (Netflix) que en ocho episodios narran las investigaciones de una pareja de policías para desentrañar una serie de asesinatos, aparentemente aleatorios, que se producen en distintos lugares de la muy civilizada Islandia.

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