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COLUMNA
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Emilio Morenatti hace fotos que aman a las víctimas

‘Detrás del instante’, en La 2, repasa la carrera del reportero gráfico que sortea todos los tabúes, porque para entender el mal hay que verlo. Nos pone en la piel de los indefensos. Con respeto, con ternura, incluso con esperanza.

Yana Stepanenko, de 11 años, es llevada por un médico del hospital de Lviv, en Ucrania, el 13 de mayo de 2022. Yana y su madre resultaron heridas en el ataque con misiles a la estación de tren de Kramatorsk.Foto: Emilio Morenatti (AP) | Vídeo: TVE
Ricardo de Querol

Cuando, en lo peor de la pandemia, Emilio Morenatti fotografió pilas de ataúdes en el crematorio de Collserola, algunos le respondían en Twitter que era un montaje, que las cajas estaban vacías. Ojalá lo hubieran estado. Cuando Morenatti fue secuestrado por pistoleros en Gaza, y cuando perdió una pierna por la explosión de una mina en Kandahar, no decayó su determinación de retratar este mundo cruel desde la mirada de las víctimas, de los indefensos. Cuando posaron para él mujeres deformadas por ataques con ácido en Pakistán, demostró que se podía encontrar la belleza en la tragedia.

Ataúdes en el crematorio de Collserola, en Barcelona, el 2 de abril de 2020. "No me podía creer que los 280 féretros estuvieran llenos. Pensaba en la historia que había detrás de cada uno de ellos. Fue una experiencia muy intensa”, dijo el fotógrafo.
Ataúdes en el crematorio de Collserola, en Barcelona, el 2 de abril de 2020. "No me podía creer que los 280 féretros estuvieran llenos. Pensaba en la historia que había detrás de cada uno de ellos. Fue una experiencia muy intensa”, dijo el fotógrafo.Emilio Morenatti (AP)

La trayectoria del reportero gráfico jerezano se repasa en el último capítulo de Detrás del instante, serie de La 2 (y en RTVE Play) sobre los grandes nombres de la fotografía española. Morenatti empezó cubriendo sucesos en la prensa local gaditana, brilló en Efe y acabó fichado por Associated Press y acumulando premios: Pulitzer, World Press Photo, Pictures of the Year, Ortega...

Los fotógrafos no son estrellas del periodismo: rara vez salen en la tele, no se busca su firma, su rostro nos es desconocido. Pero sus potentes imágenes se graban en nuestro cerebro como un relato escrito nunca podrá. Se debate mucho en las redacciones hasta qué punto mostrar el horror de la guerra, de la miseria o de la violencia. Morenatti tiene la sensibilidad para sortear tabúes —cadáveres, mutilados, maltratadas, infancias rotas— salvando en todo momento la dignidad del retratado. Con ternura, con empatía, incluso con esperanza. Sabe que para entender el mal hay que verlo. Como ahora en Ucrania.

“No digiero la estupidez humana”, dice quien capturó tanto dolor. “De Sarajevo aquí, ¿no hemos aprendido nada?”. No. Él aprendió a ponernos en la piel del otro. No es poco.

Emilio Morenatti, en 2021.
Emilio Morenatti, en 2021.bernardo perez

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Sobre la firma

Ricardo de Querol
Es subdirector de EL PAÍS. Ha sido director de 'Cinco Días' y de 'Tribuna de Salamanca'. Licenciado en Ciencias de la Información, ejerce el periodismo desde 1988. Trabajó en 'Ya' y 'Diario 16'. En EL PAÍS ha sido redactor jefe de Sociedad, 'Babelia' y la mesa digital, además de columnista. Autor de ‘La gran fragmentación’ (Arpa).

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