Carly Massy-Birch y Rupert Finch, las primeras parejas de Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton que recuerda ‘The Crown’

Los últimos seis capítulos de The Crown están disponibles en Netflix desde este jueves, y con ellos se pone punto final a la serie. Durante siete años y 60 episodios, esta ficción de Peter Morgan basada en hechos reales ha recorrido los principales acontecimientos históricos y políticos del Reino Unido, pero sobre todo los líos familiares y amorosos que rodearon el reinado de Isabel II. Esta sexta temporada, la que supone el cierre de la historia, ha dado un papel principal a personajes que han sido protagonistas indiscutibles del relato de los Windsor en la vida real, como a la icónica Lady Di. Pero también ha devuelto a la actualidad a personajes que, aunque han pasado desapercibidos y hace años que se les ha perdido la pista, de una u otra forma fueron relevantes a la hora de construir ese relato. Uno de ellos fue Kelly Fisher, la exmodelo que estaba prometida con el empresario Dodi Al-Fayed cuando este comenzó a salir con Diana de Gales, algo de lo que tuvo que enterarse por la prensa. Ahora vive en Carolina del Sur, alejada del foco mediático que sí utilizó en su día para demandar a Al-Fayed, según se ha sabido después de que la prensa vuelva a preguntarse qué ha sido de ella. Y lo mismo ha ocurrido en esta última entrega con Carly Massy-Birch, la exnovia del príncipe Guillermo, la joven que le cautivó antes, pero casi a la vez, que Kate Middleton, cuando todos ellos tenían apenas 20 años.

En el séptimo capítulo de la última temporada de The Crown aparece retratada una primera novia de Guillermo de Inglaterra a la que conoce en la Universidad de Saint Andrews, en Escocia. En la ficción, la joven se llama Lola Airdale-Cavendish-Kincaid (“Es tan pija que tiene tres apellidos”, dice de ella una camarera, compañera de Kate Middleton ―que también estudiaba en la misma universidad―, en un restaurante italiano cuando una noche les ven pasar junto a más amigos). La joven existió, pero en realidad se llamaba Carly Massy-Birch. Era estudiante de Lengua Inglesa y Escritura Creativa en el curso anterior al príncipe y estuvieron saliendo solo un par de meses. “Carly estará muy molesta de que esto haya salido a la luz. Salió con Guillermo durante seis o siete semanas cuando llegaron por primera vez a St. Andrews”, dijo Mimi Massy-Birch, la madre de la joven, en 2008, cinco años después de que Guillermo empezara a salir oficialmente con Kate, según recogía entonces el Daily Mail. “Ella se ha esforzado mucho por mantener su amistad con él en secreto, todos lo hemos hecho, y por eso estará molesta por esto”, continuó Mimi, asegurando que Guillermo, Kate y su hija eran “los mejores amigos”.

Pero eso no es lo que refleja la serie. En la ficción lo que se ve es que Lola ―Carly, en la vida real― y Guillermo ligan una noche en una fiesta, después de que el príncipe Enrique, por teléfono, anime a su hermano mayor a desmelenarse: “No seas tan estirado”. Esa misma noche empiezan a salir juntos. Sin embargo, desde el primer momento a Guillermo le llama la atención Kate Middleton, que también se fija en él (de hecho, la trama del episodio es que Carole Middleton, la madre de Kate, hace todo lo posible porque su hija coincida con Guillermo para buscarle una oportunidad amorosa con él). Mientras Guillermo está saliendo con Lola, se acerca a Kate Middleton en la biblioteca y se pone a charlar con ella, pero Lola aparece y sufre un ataque de celos. El joven príncipe se pone muy violento, incómodo, y la hoy princesa también. Justo entonces se le acerca una seguidora para pedirle un autógrafo (algo que hacen con asiduidad en el campus) y Guillermo le contesta muy borde.

Sin necesidad de destripar la engorrosa conversación que tienen a continuación los tres, que termina con ambas mujeres alejándose indignadas, lo siguiente que nos muestra la serie es que Guillermo y Lola han cortado, y que Kate tiene un nuevo novio, Rupert Finch (que también existió y al que sí han respetado su nombre real). Lo que The Crown ha obviado es un incómodo momento que sí viene recogido en el libro The Making of a Royal Romance que Katie Nicholl publicó en 2011. Según la autora, los tres coincidieron en una fiesta universitaria en la que se empezó a jugar al clásico juego de Yo nunca nunca, que consiste en que alguien proponga algo que nunca ha hecho y beban todos los que sí lo han realizado. “Yo nunca he salido con dos personas de este lugar”, debió decir Carly cuando le llegó su turno, conocedora de que Guillermo tendría que beber. Así lo contó la escritora después de reunir las historias de varios invitados a la cena, incluyendo la confirmación de Kate. Uno de ellos aseguró que, después del comentario de Carly, todos se quedaron congelados, mientras Guillermo le lanzó una mirada aniquiladora y comentó algo como “no lo puedo creer”.

Esta revelación sirvió para que Guillermo confirmara su relación con Kate de una vez por todas, según aseguró su círculo a la autora. La serie remonta esos inicios a la Navidad de 2002, cuando el actual heredero al trono británico habla con su familia e incluso se plantea dejar la universidad. A la vez, Kate lleva a Rupert a su casa y se pelea con su madre: sabe que Carole quiere a Guillermo para ella y cree que considera a su novio algo menor. Carole le dice que si quiere siga con él, pero que no lo haga por retarla. Y ahí es cuando la joven Kate empieza a reflexionar. Al final del capítulo, le manda un mensaje a Guillermo (¡en un Nokia 3310!) diciéndole: “Por favor, no te vayas de la uni. Kate”. Ficticio o no, lo cierto es que sellaron su unión en 2011 con un memorable beso en el balcón del palacio de Buckingham después de su multitudinaria boda y que ahora son los futuros reyes del Reino Unido.

En la actualidad, Rupert Finch es un reconocido abogado y está casado desde 2013 con la aristócrata Lady Natasha Rufus Isaacs, amiga de Kate. De hecho, los príncipes de Gales estuvieron invitados al enlace, igual que Rupert y Natasha fueron invitados al suyo. La vida de Carly, en cambio, es un misterio. El Daily Mail publicó en 2020 que se cree que está casada y que sigue viviendo en Londres, pero que se desconoce si, como decía su madre, sigue en contacto con los príncipes de Gales. Es probable que salgan a la luz nuevos detalles ahora que The Crown la ha traído de vuelta, cuando la gente se empiece a preguntar qué ha sido de Carly Massy-Birch.