Marie Claire recibe otros 12 millones de euros de ayuda pública

La sobrevaloración del stock y la sobredimensión de la empresa ha llevado al nuevo equipo de la fábrica de medias Marie Claire a solicitar a la Generalitat Valenciana un nuevo préstamo de 12 millones de euros que este viernes ha sido fue aprobado por el pleno del Consell. Esta es la segunda inyección de dinero público que la firma recibe desde que, hace poco más de un año, fuera adquirida por una firma de logística Think Textil, con lo que la suma de lo recibido asciende ya a 21 millones de euros.

La marca ya acordó, con el Gobierno valenciano, en junio del año pasado, la concesión de dos préstamos. Uno de ellos, de 9,5 millones se realizó a través de una línea de financiación a empresas estratégicas afectadas por la covid, que ofrece préstamos ordinarios y participativos, y vinculada al Fondo Valenciano de Resiliencia. Las ayudas a la fábrica, de la que depende prácticamente una comarca entera y más de 300 familias, han sido habituales en los últimos años y, hasta ahora, sumaban más de ocho millones de euros de los que cuatro estaban pendientes de pagar.

Con la visita del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a la fábrica, en junio de 2021, se comprometieron otros 2,5 millones con el objetivo de “asegurar la completa viabilidad de esta sociedad estratégica tanto en términos económicos como territoriales y de generación de empleo para una comarca en riesgo de despoblación como es el Alt Maestrat”, tal como dijo Ximo Puig. Pero la situación real en la que se encuentra la firma que, según fuentes de la misma, “es mucho más grave que lo que en principio se pensó”, ha obligado al nuevo equipo directivo a elevar hasta 12 millones esa segunda operación que se enmarca dentro de la línea de financiación Fininval vinculada al Fondo Valenciano de Resiliencia.

Cierre del centro logístico

Una de las medidas adoptadas por la marca ha sido el cierre del centro logístico que la empresa tenía en la localidad castellonense de Borriol, cuya actividad ha sido trasladada a Vilafranca, con el fin de aunar y optimizar el trabajo. Según las mismas fuentes, la empresa ofreció a todos los trabajadores la oportunidad de recolocarse en las instalaciones de Villafranca del Cid, aunque no todos accedieron.

Además, el nuevo equipo directivo ha puesto en marcha una reestructuración de los turnos que han pasado de ser de cinco a cuatro días con el fin de optimizar también los recursos y ahorrar energía. Asimismo, se ha reducido el número de referencias para lograr una gestión más eficiente, y la próxima semana presentarán una plataforma y nuevos canales de venta online para poder llevar a cabo la internacionalización prometida.

La empresa beneficiaria deberá destinar los fondos recibidos del préstamo únicamente a financiar los costes fijos incurridos en este periodo que no fueron cubiertos por la contribución a los beneficios ni financiados por otras fuentes de financiación externas. Como consecuencia de la aprobación del préstamo, la empresa está obligada, entre otras cuestiones, a mantener su actividad hasta la completa cancelación del préstamo en Vilafranca del Cid, promoviendo y asegurando el mantenimiento del empleo en la zona. Además, deberá solicitar al Institut Valencià de Finances (IVF) autorización para iniciar cualquier expediente de regulación de empleo, la externalización de parte o de toda la actividad fuera de Vilafranca, así como para la apertura de nuevos centros de trabajo fuera de la localidad.