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Jaume Collboni anuncia que el proyecto del tranvía hasta Francesc Macià estará listo en julio, pero no pone fecha a las obras

El alcalde de Barcelona pide a la Generalitat 3.000 millones de inversiones en 10 años para ampliar la red de metro

Clara Blanchar
Tranvía Barcelona
Las obras del tranvía de Barcelona, en la Diagonal con Verdaguer.Gianluca Battista

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha lanzado este viernes dos mensajes políticos vinculados a las infraestructuras de la ciudad. En genérico, ha pedido inversiones en infraestructuras para Barcelona y su área de influencia. En concreto, ha hablado del tranvía y de la red de metro. El primer edil ha reafirmado que es partidario de culminar la unión de las dos redes del tranvía, pero ha insistido que no será de forma inmediata. Collboni llevaba además una noticia bajo el brazo: ha anunciado que el proyecto ejecutivo del último tramo para unir las dos redes del tranvía de Barcelona (entre Verdaguer y Francesc Macià), estará acabado este verano, en julio. De hecho, el encargo es una herencia del pasado mandato, con Ada Colau de alcaldesa y cuando Junts gobernaba en materia de infraestructuras en la Generalitat. Pero el primer edil sigue sin poner fecha al inicio de las obras. La ciudad, defiende, debe recuperarse del actual frenesí de obras (primera fase del tranvía, L9 del metro, L8 de los ferrocarriles, Via Laietana, Rambla) antes de abrir otro melón y poner patas arriba otra zona de la ciudad. El socialista también ha reclamado a la Generalitat que acelere todos los frentes previstos de ampliaciones de la red de metro: 3.000 millones en 10 años.

Collboni ha pronunciado una conferencia en el World Trade Center del Puerto organizada por el Círculo de Infraestructuras. Tanto el presidente del Puerto, Lluís Salvadó, como el del Círculo, han celebrado su gestión en contraste con la de su sucesora, Ada Colau, a quien no han nombrado explícitamente. “Haremos cosas importantes para a ciudad como la Copa del América, y que no tenga titulares es positivo”, ha dicho el primero. Vila le ha recibido de forma entusiasta: “Llegamos al final del mandato pasado exhaustos, por fin afrontamos un mandato de discusión serena y poco dogmática, sin arrebatos”. “La ciudad vivió un momento extraño en reputación, cuando alguien fuera te preguntaba era difícil de responder. La agenda se ha podido revertir”, ha aplaudido el exconsejero.

Sobre el tranvía y su inicio de obras, ha concretado: “Habrá que ir viendo, tenemos muchas obras en el Eixample, mi compromiso es dejar que respire y ver las obras también de los ferrocarriles [la unión de la L8 entre plaza de Espanya y Gràcia]. Es importante que tengamos proyecto, estamos acabando la primera fase del tranvía y hemos de ver cómo. Un año y medio o dos, y luego decidiremos”. Un calendario que hace difícil, aunque no imposible, que las obras del tranvía entre Verdaguer y Francesc Macià arranquen antes de las elecciones de 2027.

Collboni ha defendido “el buen momento de la ciudad”, celebrando que haya alcanzado los 1,7 millones de habitantes y tenga la tasa de paro más baja desde 2007. “Ahora se trata de ganar velocidad” y de “generar confianza y recuperar el optimismo de lo que Barcelona ha hecho y puede hacer”. El alcalde ha asegurado que “Barcelona invierte tres veces más que la Generalitat” y ha afirmado: “Las infraestructuras son la base para dar respuesta a las necesidades de las personas y la realidad metropolitana”. El alcalde ha reprochado, sin concretar, la falta de inversiones de la última década y ha sacado pecho de los casi mil millones de inversión que prevé el presupuesto que la semana que viene llevará a votación.

Entrando en materia de infraestructuras, ha centrado su inversión en las ferroviarias: “La necesidad de extender la red de metro”, que, ha dicho, con visión metropolitana, la de la Barcelona de los cinco millones, tiene que ver con la política de vivienda, de infraestructuras energéticas o agua. Su gran apuesta es el metro, ha afirmado: “El sistema de transporte más asequible, democrático y ecológico”. “Pido al Govern que señale el crecimiento de las líneas de metro para recoser la Barcelona del futuro, con una inversión de 3.000 millones de euros en los próximos 10 años, es asumible, debemos hacer el esfuerzo de acelerar el esfuerzo inversor”, ha defendido. Y se ha referido a la L9 que recurrirá la parte alta de la ciudad, la citada L8 de los ferrocarriles, la L4 entre La Pau y la Sagrera, o la extensión de la L1 desde Fondo, en Santa Coloma, hasta Badalona; y la L3 hasta Esplugues. Collboni también defiende la ampliación de la L2 por Montjuïc hasta La Marina.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.
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