La Guardia Civil localiza el cadáver del adolescente desaparecido el pasado 5 de enero en el mar Menor

Veinte días después de que el joven Ivaylo Petrov, de 16 años, desapareciera en aguas del mar Menor tras volcar la canoa en la que navegaba de madrugada con dos amigos, su cuerpo ha sido localizado por la Guardia Civil. Los buzos del GEAS del instituto armado lo han encontrado sumergido a una profundidad de unos 5 metros en la zona del muelle de San Antonio, a pocos metros de la costa y a una distancia de entre 1.000 y 1.500 metros del puerto de Los Alcázares, según han confirmado a EL PAÍS fuentes del Instituto Armado. La Delegación del Gobierno central en la Región de Murcia ha confirmado también el hallazgo del cadáver, que será traslado al Instituto Forense de San Javier, donde se procederá a realizar la autopsia para determinar la causa de la muerte de Ivo, como era conocido. La abogada de la familia, Verónica Ene, ha indicado a EL PAÍS que la autopsia preliminar tardará de dos a tres días. Por el momento la familia se ha negado a dar declaraciones.

A Ivo Petrov se le había perdido la pista en la madrugada del 5 de enero, cuando salió a navegar en una canoa con otros dos amigos, Francisco Javier, de 22 años, y un mejor de 17. En torno a las 2.30, el Club Náutico de Los Alcázares (Región de Murcia, 17.600 habitantes) recibió un aviso de naufragio de los servicios de emergencias. Una de sus lanchas de salvamento logró rescatar con vida a los dos amigos del chico. Exhaustos y con signos de hipotermia, fueron ellos los que relataron que el desaparecido había llegado de madrugada a casa de Francisco Javier diciendo que había encontrado una canoa, y decidieron ir a navegar con ella. Unos mensajes de WhatsApp que el adolescente desaparecido envió a una amiga contradicen esa versión y muestran que habrían sido los amigos los que le citaron en casa de Francisco Javier a la 1 de la madrugada, algo que él, en un primer momento, rechazó.

Según la versión de los dos rescatados, aunque habían planeado “solo ir de muelle a muelle”, más tarde decidieron ampliar la trayectoria hasta La Perdiguera, un peñasco inhabitado a casi siete kilómetros de la costa de Los Alcázares, pero no lograron alcanzarlo. Aseguran que llevaban con ellos tres remos, uno de los cuales se partió por la mitad durante la travesía, y una linterna. Mientras remaban, siempre según su versión, Ivo se puso de pie para encenderse un cigarro, lo que desequilibró la canoa que acabó volcando. Dos de ellos saltaron de la canoa y nadaron hacia la orilla. Ivo siguió agarrado a la barca porque no sabía nadar. El naufragio se produjo entre el muelle de San Antonio y el Club Náutico.

El dispositivo de búsqueda se puso en marcha esa misma noche, sin éxito. Durante estos 20 días se ha buscado a Petrov por tierra, mar y aire, empleando para ello un helicóptero con cámara térmica, embarcaciones del Ejército del Aire de la base de San Javier, de la Guardia Civil, de Salvamento Marítimo y de Protección Civil, y los buzos del GEAS de la Guardia Civil. Agentes del cuerpo han recorrido también a pie las dos islas que hay en la laguna salada, y al dispositivo se sumaron también pescadores de la zona, revisando artes de pesca, cañizales, orillas y la superficie de la albufera salada. Todo sin éxito hasta esta mañana, a pesar de que la búsqueda se había centrado en la zona en la que ha sido hallado el cuerpo. Fuentes de la investigación indican que por motivos de la marea del mar Menor, el cuerpo ha podido ser movido, impidiendo su localización hasta ahora.

A cinco metros de profundidad

La Guardia Civil ya ha iniciado el procedimiento para sacar el cadáver del mar, donde estaba sumergido a una profundidad de unos 5 metros y a una distancia de entre 1.000 y 1.500 metros del puerto de la localidad murciana de Los Alcázares. La Delegación del Gobierno informa de que el joven ha sido localizado en la mañana y tras el correspondiente procedimiento judicial de levantamiento del cadáver se procederá a hacerle la autopsia para determinar la causa de la muerte.

La familia de Petrov ha puesto durante todo este tiempo en duda la versión que han dado del suceso los chicos rescatados, a los que aseguran que consideraban una mala compañía para el joven. Tampoco los investigadores creen factible que los dos chicos supervivientes permanecieran nadando una hora y media hasta que fueron rescatados, puesto que no eran buenos nadadores y el agua estaba fría esa noche, a unos 11 grados. En esas condiciones, sostiene Sergio Gil, coordinador de la búsqueda de Ivo y jefe del servicio de Emergencia Municipal, es difícil que aguantaran a flote más de media hora.