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Destrozos y tensión con la policía en una protesta de bomberos comarcales en Ourense

Un bombero resulta herido en una concentración ante la Diputación en la que parte de los más de 200 manifestantes forcejearon con los antidisturbios

Pontevedra -

Más de 200 bomberos de los parques comarcales gallegos, en huelga desde el pasado 15 de junio para reclamar mejores condiciones laborales, se han movilizado este lunes delante de la Diputación Provincial de Ourense en el marco del calendario de protestas anunciado por el comité de huelga. Las protestas arrancaron el viernes ante la institución provincial de Pontevedra, y esta jornada ha sido el turno de la provincia de Ourense, donde los bomberos se concentraron ante el Pazo Provincial a gritos de “dimisión”, “bomberos pobres, nunca máis” o “corrupción”, lanzando pintura a la fachada del edificio y además quemando neumáticos en el centro de la ciudad.

La calle se llenó de humo por la quema de los neumáticos y el uso de botes de humo, bengalas y petardos. Los más de 200 bomberos se concentraron ante la puerta de la sede institucional donde se encontraban decenas de antidisturbios y donde se vivieron momentos de tensión. Uno de los bomberos resultó herido en la nariz al ser golpeado en el forcejeo. Según fuentes de los bomberos sufrió una rotura del tabique nasal, por lo que fue llevado en ambulancia al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense y espera el parte de lesiones.

Por su parte, el sindicato policial SUP Galicia ha denunciado en redes sociales la “radical” protesta en la que, denuncia, los manifestantes atacaron “con gran violencia y lanzallamas incluido” a los agentes que protegían el recinto oficial. En este escenario, ha avanzado su atención de personarse como acusación particular para reclamar por las lesiones ocasionadas a dos agentes: “Radical movilización de los bomberos frente a la Diputación de Ourense que con gran violencia y con lanzallamas incluido, atacaron a los agentes de la Policía Nacional que protegían el recinto”, ha difundido el Sindicato Unificado de Policía (SUP) en las redes sociales.

La protesta partió de la Alameda, frente al edificio principal de Correos, a escasos metros de la Diputación Provincial, manteniendo cerrada la calle durante algo más de dos horas. En su recorrido, los bomberos portaron pancartas reivindicativas en las que se podía leer “a nosa loita, a vosa vergoña” (“nuestra lucha, vuestra vergüenza”, en gallego). Al llegar ante el edificio del ente provincial orensano reclamaron ser recibidos por el presidente, Luis Menor, quien fue Director Xeral de Emerxencias durante su etapa en la Xunta de Galicia y este accedió a la reunión.

A su término, el presidente del comité de huelga, Ángel Moldes, de la CIG, informó que el presidente provincial se había comprometido a mediar para que la mesa de negociación que integra la Xunta, diputaciones y representantes sindicales se reanude, después de haber quedado las reuniones aplazadas mientras a la espera de estudiar las reivindicaciones del colectivo”.

“Esperamos que nos convoquen esta semana porque estas movilizaciones están trayendo heridos, tenemos un bombero con un golpe muy importante en la cara”, ha advertido Moldes. “Soy escéptico sobre el compromiso de cualquier político mientras no veamos la convocatoria de la mesa y se pongan los documentos sobre la mesa porque hasta ese momento no sabemos lo que tenemos”, ha esgrimido el representante sindical.

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Por su parte, el presidente de la diputación orensana, Luis Menor, informó que se ha comprometido a trasladar las peticiones a la mesa de negociación, peticiones que, ha recordado, “son públicas y conocidas” y señaló que la negociación “está bastante distanciada”, informa Europa Press.

“Tengo que dejar claro que esto es un servicio de la comunidad autónoma y todo el mundo tiene que saber que va a ser una solución autonómica”, ha aclarado Menor garantizando que será “única y conjunta”, “sin colores políticos” y “sin diferencias” entre los consorcios, pero reconociendo que, en todo caso, “las posturas están muy alejadas” y que “ahora mismo no veo una solución inmediata”.

En esta línea, ha insistido en que “no se puede entrar en subastas”, “la solución tiene que ser para toda Galicia porque el servicio se debe prestar con la misma calidad en toda la Comunidad Autónoma”. Menor puso de relieve que Ourense “es la provincia que está en las mejores condiciones” en esta negociación porque es la provincia en la que los bomberos “tienen los salarios más altos de toda Galicia” y en donde “se tiene atendida la mayor parte de las reivindicaciones”, ha incidido.

Menor ha condenado la forma de reivindicación de los bomberos de los parques comarcales. “No se puede perder la razón por la fuerza con este tipo de actuaciones”, ha criticado el presidente provincial, afeando los ataques al mobiliario público y a la institución. “No me parecen los correctos, creo que nos podemos entender de otros modos, y así se lo he trasladado a los manifestantes, personas con las que trabajé durante muchos años y a las que respeto profundamente y sé que me respetan a mí”, ha agregado.

Los bomberos exigen un convenio colectivo a nivel autonómico, unificado para todas las provincias según su profesión; mayor dotación de medios técnicos y mayor dotación de recursos humanos, así como fijeza en el empleo de acuerdo con la doctrina del Tribunal Supremo de enero de 2022. El colectivo ha anunciado que el calendario de movilizaciones proseguirá con otra movilización el 27 de octubre ante la Diputación de Lugo, y el 31 de octubre ante la de A Coruña.

“Las medidas que acordamos en asamblea son las que vamos a mantener. Esto es asambleario, no vamos a cambiar la hoja de ruta”, esgrimía el presidente del comité de huelga, Ángel Moldes, ante sus compañeros a las puertas de la Diputación de Ourense. Además han anunciado una manifestación el 17 de noviembre en Santiago de Compostela y, por el momento, la celebración de otra asamblea el 20 de noviembre con el objeto de valorar el estado de las negociaciones y “la posible adopción de nuevas medidas”, entre las que citan cierres, acampadas en lugares públicos e incluso huelga de hambre de los casi 500 bomberos de los parques comarcales de Galicia.

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