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Buena música pero repetida

George Benson inaugura unos Veranos de la Villa que se estrenan con nuevo escenario y una propuesta artística muy conservadora

Digámoslo pronto. El sonido del nuevo escenario Puerta del Ángel, muy decente; la entrada, con tres cuartos de aforo cubierto, razonable; el acceso, algo lioso pero no caótico. Y por contarlo todo, el retraso de 25 minutos, inusual para estos eventos municipales tan amigos del rigor y la asepsia. Los Veranos de la Villa estrenaban anoche edición y enclave, y más de uno respiraría aliviado: todo según lo previsible. Tan previsible, por cierto, como el menú musical del mes.

George Benson es cualquier cosa menos un neófito en nuestros escenarios veraniegos. Su primera década aportó discos muy apañados; la segunda, muy famosos; el último cuarto de siglo, irrelevantes. Por lo visto anoche, mantiene los dedos ágiles, la diplomacia intacta, las baladas pastel y la habilidad de escarbar en el legado de Wes Montgomery. Por lo demás, una intensa sensación de déjà vu. Y para qué complicarnos la vida.

Muchos de los artistas ya han pasado por el festival con anterioridad

El de ayer era el primero de los 22 conciertos sucesivos que Puerta del Ángel albergará hasta que el mítico Burt Bacharach cierre el telón, el 29 de julio. La programación incluye firmas referenciales, pero con dos características demasiado reiteradas: muchos ya han desfilado por los Veranos con anterioridad y casi todos acreditan más de tres décadas sobre los escenarios. Benson cumplía ambas: su primer disco se remonta a 1964, y en 2007 también le vimos por estos lares.

"Buscamos artistas importantes, reconocidos, con carreras consolidadas y una base sólida de seguidores", resumía ayer el director de este certamen municipal desde hace cuatro temporadas, Manuel Gutiérrez. La ausencia de músicos más jóvenes se debe, dice, a lo inapropiado del espacio. "Hace unos años programé algunos grupos de música urbana en el Conde Duque y me equivoqué. El público no lo entendió. Tenemos que ir ampliando la propuesta poquito a poco".

Algunos nombres parecen, como admite el propio Gutiérrez, "casi socios del festival". A la fadista Dulce Pontes (miércoles, 8) ya la vimos el año pasado, igual que en 2006. También ostentan la condición de repetidores Kool & The Gang (esta noche, igual que en 2007), Cesaria Évora (su espectáculo Rogamar, el sábado, 11, es el mismo que el de hace tres años), Youssou N'Dour (que comparece el martes, 21, y ya actuó en 2007) o Gilberto Gil, el domingo, 26, aunque al menos en su caso hay que remontarse hasta 2004 para encontrar su anterior comparecencia.

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Gutiérrez admitió que, con vistas al futuro, los Veranos "no pueden excederse con las repeticiones", pero argumenta que algunas figuras internacionales, como Tom Jones, "han preferido esperar a ver qué sucede con el nuevo escenario". Y añade: "Tampoco olvidemos que John Fogerty , Jerry Lee Lewis o James Taylor no habían actuado jamás en Madrid. Y a Laurie Anderson la tuvimos aquí hace un par de temporadas, pero tampoco la hemos visto nunca en la ciudad junto a Lou Reed".

Como novedad, este año tampoco hay gallinero (público de pie), con dos únicas excepciones: Fogerty y Tequila, el domingo, 12. En ambos casos, el aforo se amplía de 2.500 a 3.172 espectadores; para el resto de veladas, todo el mundo deberá permanecer en sus asientos.

George Benson, durante su actuación en los Veranos de la Villa.
George Benson, durante su actuación en los Veranos de la Villa.SANTI BURGOS

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