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La Ertzaintza desaloja a un centenar de sindicalistas encerrados en el Hospital de Txagorritxu

El País

Agentes de la Ertzaintza desalojaron a mediodía de ayer a los cerca de 100 delegados sindicales de ELA, SATSE y ESK que se habían encerrado unas cinco horas antes en el vestíbulo del Hospital de Txagorritxu de Vitoria dentro del conflicto laboral que mantienen abierto con la dirección de Osakidetza. Es la segunda vez en 48 horas que la policía vasca desaloja a los sindicalistas encerrados en un hospital tras lo ocurrido el pasado martes en el de Cruces.

Los agentes fueron sacando uno a uno a los concentrados, con algún pequeño forcejeo en el caso de los que se resistieron. La portavoz de ELA, Izaskun Garikano, calificó el desalojo de "tremendamente violento, que ha llevado a varias personas a Urgencias", a lo que fuentes policiales replicaron que "no se produjeron incidentes graves".

"Estamos indignados por que Osakidetza y el consejero de Sanidad son incapaces de resolver esta situación y, en vez de llamarnos para sentarnos a hablar y llegar a un acuerdo, nos mandan a la Ertzaintza", se quejó Garikano. "Si siguen por ese camino, habrá conflictividad hasta la extenuación", añadió. La representante de la central nacionalista avanzó que las movilizaciones continuarán durante los próximos meses y dejan abierta la puerta a convocar una nueva huelga general después del verano como las que celebraron los pasados 19 y 22 de mayo.

El gerente del hospital vitoriano, Francisco Villar, explicó poco antes del desalojo que no era "tolerable la trifulca" que se estaba organizando a la entrada del centro, con gritos, bocinas y sentadas, porque afectaba "al confort de los pacientes", según informa Efe. Villar mostró su indignación por la protesta y anunció que no iba a permitir que se interrumpiera la entrada a los pacientes y usuarios.

Osakidetza dejó claro que respeta las reivindicaciones sindicales, pero no tolerará que "degeneren" los centros sanitarios ni que se moleste a quienes van a ellos, recalcó su director de Recursos Humanos, José Andrés Blasco. "Están intentando [los sindicatos] montar un espectáculo y una provocación para que les saquemos con la Ertzaintza", agregó.

Osakidetza reanudará la próxima semana las negociaciones con las seis centrales que están representadas en la mesa de negociación (las tres que están manteniendo las protestas, junto a CCOO, LAB y el Sindicato Médico), pero está dispuesta a convocar probablemente en julio la oferta pública de empleo de 4.000 plazas, que las centrales rechazan por insuficiente, haya o no acuerdo.

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