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Reportaje:

Las voces que escuchó Badenes

La Universitat edita un libro de artículos publicados en la revista 'Ritmo' por el desaparecido crítico musical de EL PAÍS

La Universitat de València presentó ayer en su Aula Magna el libro Voces de Gonzalo Badenes, que fue crítico musical de EL PAÍS hasta su fallecimiento (el 20 de agosto de 2000).

Voces es una recopilación de los artículos que mensualmente publicaba Gonzalo Badenes para la revista Ritmo, desde junio de 1987 hasta julio de 2000, con una continuidad que, con pequeñas excepciones, dieron un total de 101 escritos, extendiéndose el comentario, en ocasiones, a dos números de la revista. Ni que decir tiene que Badenes, además, publicaba en Ritmo innumerables críticas de discos, entrevistas, críticas de actuaciones, etc. Pero es la sección de Voces la que ha encontrado ahora una magnífica recopilación en la cuidada edición que se presenta.

Badenes trabajó también para otros medios, entre ellos EL PAÍS, y realizó una gran cantidad de programas de mano destinados a diferentes auditorios, especialmente para el Palau de la Música de Valencia. Precisamente ayer, los responsables de la Universitat anunciaron que la recopilación de programas de mano del crítico se editará lo más pronto posible.

La edición de Voces ha estado a cargo de Pedro González Mira, y se han incluido cuatro artículos previos firmados por el rector Francisco Tomás Vert y tres personajes que, como críticos o editores, son bien conocidos en el mundo musical: Arturo Reverter, Ángel Carrascosa y el propio Pedro González Mira. Además de este último, en la presentación intervinieron el rector; Rafael Gil, vicerrector de Cultura) y el profesor Vicente Galbis.

Gonzalo Badenes era un verdadero experto en todos los géneros musicales: música de cámara, sinfónica, instrumental, etc, pero sentía hacia el canto una verdadera debilidad, perceptible en las páginas de Voces. Allí, además de una inagotable fuente de datos, el lector se encuentra con el estilo de un enamorado del canto, preciso y exigente, sí, pero cálido y comprensivo con las voces que analiza. Su inmensa colección discográfica le permitió escuchar a cantantes ya desaparecidos además de los que pudo disfrutar en directo. Esa colección, que legó a la Universitat de València, está a disposición del público en la Escuela de Magisterio.

Los artículos de Voces están estructurados siguiendo un esquema que se reveló funcional y didáctico. Cada uno se estructura en cuatro apartados donde se analiza la vida del cantante, la voz -en cuanto a las cualidades intrínsecas del instrumento en sí- el arte, donde Badenes expone el uso que cada músico hace de su instrumento, y, por último, una ficha con la discografía y bibliografía más relevante del cantante.

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Uno de los valores más importantes del libro, tal como señala Arturo Reverter en el prólogo, es que conocía muy bien cuáles eran los puntos débiles de sus divos y en absoluto los ocultaba, sino que exponía sus virtudes y sus defectos en cuatro palabras. Estas cualidades, espíritu crítico y concisión, se pudieron disfrutar también en todas las críticas que escribió para EL PAÍS y otros medios.

En los intermedios de los conciertos, círculos de aficionados le rodeaban constantemente para conocer su opinión sobre la música que se estaba escuchando. Y es que, como señala Ángel Carrascosa, pocos críticos eran tan fiables como él, porque, además, no sólo sabía de música, sino que era una persona culta en el mejor sentido de la palabra, con lo que su comprensión de la música adquiría una amplia dimensión.

Pedro González Mira, redactor-jefe de la revista Ritmo, ha trabajado mucho para que este libro pudiera salir adelante, ya que conocía bien cuánta utilidad y cuánto aprendizaje puede proporcionar sobre la voz cantada. Desde cantantes muy antiguos hasta los que ya estaban en flor cuando le sorprendió la muerte, el índice de estas 100 voces (101, para ser exactos) es impresionante: Maria Callas, Birgit Nilson, Magda Olivero, Ileana Cotrubas, Lauritz Melchior, Antonio Cortis, Waltraud Meier, Alfredo Kraus, Montserrat Caballé... una lista tremenda de grandes artistas, con cabida para especialistas en todo tipo de repertorios, pasan por las manos -por la pluma- de Badenes.

Y lo mejor es que, tras su análisis certero y sin concesiones, transmite también un conocimiento profundo de cuáles eran -o son- las capacidades más notables de cada cantante. Proyecta así la admiración que sentía hacia la voz humana y provoca en el lector un sincero deseo de escucharla.

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