La presidenta de Filipinas acepta impulsar cambios para no dimitir
La presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo, logró ayer un acuerdo con 17 partidos progubernamentales y de la oposición para llevar a cabo reformas políticas y evitar dimitir tras las acusaciones de fraude electoral y corrupción. Macapagal se comprometió a pasar del sistema presidencial que rige el país desde hace más de un siglo a un sistema de corte parlamentario, y anunció que dará más detalles sobre las reformas en su discurso sobre el estado de la nación del 25 de julio, fecha en la que se reanudan las sesiones del legislativo. Una semana después se iniciará una asamblea constitucional para realizar los cambios, según afirmó el presidente del Congreso, José de Venecia.
El acuerdo se produce días después de que, el pasado domingo, la influyente Conferencia Episcopal Filipina acordara no pedir la dimisión de la presidenta. Parece que ésta consigue así superar la peor crisis de su mandato, que provocó la dimisión de 10 miembros de su Gobierno la semana pasada. Para reemplazar al titular de Finanzas, Macapagal nombró ayer al banquero Margarito Teves.
Mientras, la policía se preparaba para la manifestación de hoy convocada por los partidos de izquierda. Se espera que cientos de personas se reúnan en Manila para pedir la dimisión de Macapagal.
