Cruz Roja Española palía la escasez de agua potable
Una de las demandas más urgentes es el agua potable. Y aquí es donde está actuando el entusiasta equipo de Cruz Roja Española, que ha instalado un campo capaz de producir un millón de litros al día. "En estos casos, el agua es fundamental. Es la primera necesidad", dice Íñigo Vila, jefe del grupo. Un equipo compuesto por técnicos en agua, saneamiento y logística, con larga experiencia en anteriores desastres. "El terremoto rompió la planta potabilizadora y las conducciones. Así que estamos dando el agua [que es distribuida por medio de camiones] que pide la población [Meulaboh tiene 60.000 habitantes]", dice Vila, de 32 años. Además, ha traído cinco estaciones móviles de tratamiento capaces de suministrar agua que se pueda utilizar en el hospital, a partir incluso de aguas negras.
Uno de los retos, según Charlie Higgins, coordinador de Naciones Unidas en la zona, será "impedir que los campamentos temporales se conviertan en permanentes". "Y esto es cuestión de dinero. Tenemos que ser flexibles para que los fondos de emergencia que sobren puedan emplearse en la reconstrucción". Mientras, muchos de los desplazados sólo desean volver a sus pueblos. "Sólo queremos regresar, aunque sea descalzos", dice Azwar.
