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La policía investiga la muerte violenta de una mujer en Tarragona

El cadáver de la médica apareció flotando en la orilla de la Platja Llarga

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía investigan la muerte violenta de la médica M. T. P., de 29 años y vecina de Tarragona, cuyo cuerpo sin vida apareció ayer flotando en la orilla de la Platja Llarga de la ciudad. La mujer, miembro de una conocida familia de comerciantes de Tarragona, salió ayer por la mañana de su casa con su coche para hacer deporte. En la playa, una o varias personas la agredieron hasta causarle la muerte.

El cadáver de M. T. P., según informó la Subdelegación del Gobierno en Tarragona, presentaba un fuerte golpe en la cabeza y dos incisiones de arma blanca en el abdomen.

Aunque la policía mantiene abiertas todas las líneas de investigación, la primera inspección ocular de los agentes descartó que la joven hubiera sufrido alguna agresión sexual. Aún así, fuentes cercanas a la investigación señalaron que la autopsia, cuyo resultado está bajo secreto de sumario y todavía no había finalizado al cierre de esta edición, será lo que determine con exactitud este extremo.

Igualmente, siempre según estas fuentes, el móvil del robo está prácticamente descartado, puesto que la fallecida no llevaba pertenencias de valor, iba vestida con ropa deportiva y sin documentación. Por otra parte, la policía también desechó la hipótesis de que se tratara de un caso de violencia en el ámbito familiar.

En cambio, los investigadores han abierto una línea de trabajo, que tomaba fuerza en la tarde de ayer, para averiguar si fue la propia fallecida quien se infringió las heridas.

La doctora trabajaba en el hospital Joan XXIII de Tarragona. El cuerpo fue encontrado sobre las ocho y media de la mañana por unos operarios municipales, que durante el invierno pasean a diario por las playas para limpiarlas de residuos. Al ver el cuerpo en el agua, flotando cerca de la orilla, avisaron a la comisaría de la policía nacional, que inició las investigaciones. Al cabo de pocos minutos, los agentes localizaron el vehículo de la joven, un Volkswagen Polo, cerrado con llave, a unos 200 metros del lugar donde encontraron el cadáver.

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Hasta ahora la hipótesis de la policía es que la fallecida fu e agredida cerca de su coche y posteriormente arrastrada hasta el mar, donde fue arrojada. Los agentes condujeron el vehículo a las dependencias de la policía para tratar de obtener alguna prueba.

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