Defensa nacional frente a crisis exteriores

En su informe, el ex presidente federal Von Weizsäcker ha propuesto un Ejército de 240.000 hombres, de los cuales 210.000 serían contratados y profesionales, y los 30.000 restantes, reclutados por medio del servicio militar obligatorio, según filtraciones de su informe. Las fuerzas de intervención en caso de crisis llegarían hasta 140.000 hombres. Medios militares critican esta proporción como exagerada, porque dejaría pocos efectivos para la defensa básica del territorio alemán. La Asociación Militar Alemana (el sindicato militar), escéptica ante la experiencia de los países que han abolido el servicio militar, ha rechazado la propuesta de Weizsäcker por entender que daría al traste con el servicio militar obligatorio. El sindicato recuerda que la defensa del territorio nacional tiene prioridad ante la gestión de crisis exteriores.

Weizsäcker, que quiere suprimir la mitad de los 600 cuarteles actuales, calcula que será necesaria una inversión de 120.000 millones de marcos en los próximos diez años. El inspector general del Ejército, Hans-Peter von Kirchbach, por su parte, ha propuesto un Ejército de 290.000 soldados, y el ministro Scharping estaría satisfecho con unos efectivos de 280.000 soldados, de los cuales 210.000 fueran profesionales y contratados. La oposición democristiana subraya que hay que analizar primero el concepto de amenaza, y se inclina por un total de 300.000 hombres.

Desde la prensa, los oficiales retirados advierten sobre viejas amenazas renovadas. El almirante Dieter Wellershoff, por ejemplo, considera que el proceso de reformas en Rusia se realiza "a paso de tortuga y va acompañado de nostalgia y retórica de gran potencia". "Desde el punto de vista de la política de seguridad", señala el almirante, "hay que constatar que no hemos adquirido más seguridad en los últimos cinco años".