Alemania pide un reparto de refugiados de Kosovo entre los países de la UE
El canciller Schröder quiere que el presidente Yeltsin ayude a buscar una solución política
Alemania, que ejerce la presidencia de la Unión Europea (UE), anunció ayer un cambio en su estrategia para afrontar la oleada de refugiados de Kosovo. El canciller federal, Gerhard Schröder, dijo que su país está dispuesto a acoger un "contingente apropiado" de refugiados y que pedirá a los otros países de la UE que hagan lo propio. La propuesta del canciller, que se refirió a un "reparto adecuado de las cargas", coincide con la del Gobierno belga.
Alemania da muestras de impaciencia por la prolongación del conflicto, aunque sus dirigentes cierran filas ante la opinión pública. En calidad de presidente del Consejo de la UE, Schröder habló ayer por teléfono con el presidente ruso, Borís Yeltsin, y le pidió que empleara todo su peso político para lograr el cese de los asesinatos y las deportaciones en Kosovo y conseguir una solución política del conflicto, según informó el portavoz del Gobierno, Uwe-Karsten Heye. Hasta que Schröder se pronunció ayer por la apertura de la UE a los refugiados, los portavoces del Gobierno, incluido el viceministro de Exteriores, Günter Verheugen, y el ministro del Interior, Otto Schily (que hoy visita Albania), daban prioridad a su acomodación en los países fronterizos de Kosovo y trataban de disuadir los movimientos migratorios a los Estados de la UE.Tras el cambio de posición de Alemania se perfilan tres factores: la dificultad de organizar la asistencia humanitaria en Macedonia y Albania, la insistencia de estos países en que los refugiados son un "problema europeo" y, por tanto, un problema de la UE, y el miedo a que la presencia masiva de refugiados albaneses en Macedonia suponga un nuevo peligro desestabilizador a sumar a la guerra.
Interrogado sobre la posición del ex canciller Helmut Schmidt, que ha criticado los bombardeos de la OTAN, Schröder afirmó: "También los grandes estadistas se pueden equivocar". La participación alemana en los ataques de la Alianza Atlántica ha provocado tensiones especialmente entre Los Verdes, desgarrados en una discusión sobre su propia identidad. Este partido, socio de los socialdemócratas en el Gobierno federal, ha convocado un congreso extraordinario el 13 de mayo para debatir sobre Kosovo, después de que el ala pacifista recogiera más de 700 firmas de militantes y funcionarios.