25.000 términos actualizan el diccionario de María Moliner
Internet, bypass, look, ecografía, contracultura o talibán ya están en el clásico diccionario del uso del español María Moliner, cuya nueva versión estará a la venta el próximo día 12 de noviembre. Editado por primera vez en 1966 (tras 15 años de trabajo de María Moliner), el diccionario se ha actualizado con 25.000 nuevas acepciones y se ha reordenado, sustituyendo el orden por familias de palabras por el orden alfabético. Unos cambios que, según los responsables de la editorial Gredos, ya fueron pensados e iniciados por la propia Moliner y que facilitan la consulta del diccionario.
"Sigue siendo el María Moliner, se ha respetado absolutamente, simplemente se ha mejorado y actualizado", indicó ayer Isabel Calonge, una de las responsables de la nueva edición de este diccionario, que es, junto al ideológico de Julio Casares y el ilustrado de Samuel Gili Gaya, uno de los trabajos lexicográficos excepcionales de la lengua española.
Lápiz y goma
María Moliner (1900-1981) concibió la idea de elaborar un diccionario para ayudar a su hijo mayor a financiar una clínica. Ella pensó en un trabajo para cinco años, pero finalmente se pasó 15 reuniendo, ordenando y descifrando palabras. Moliner trabajaba en su casa entre cinco y diez horas diarias, con la ayuda de una máquina de escribir portátil, un lápiz y una goma. Dividía una cuartilla en cuatro partes iguales y en ellas confeccionaba las fichas correspondientes a cada palabra. Alumna de la Institución Libre de Enseñanza y una de las primeras mujeres universitarias de España, María Moliner tuvo cuatro hijos. Como no le gustaba trabajar sola, su marido se sentaba a su lado y a veces la ayudaba midiendo con una cinta métrica los tacos de fichas que ella acumulaba. Tras la publicación del diccionario (elogiado por filólogos y escritores), fue propuesta para ocupar un sillón en la Real Academia. A pesar del apoyo de académicos como Rafael Lapesa, no fue elegida.