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Naipes centenarios salen del museo

Sesenta barajas de cartas fabricadas en catorce países y valoradas en más de 160 millones de pesetas se exponen desde ayer en la Sala Fundación Caja Vital de Vitoria (Postas, 13-15), con motivo del 130 aniversario de la empresa Naipes Fournier. Las colecciones, que se mostrarán al público hasta el próximo 1 de noviembre, han sido seleccionadas por su especial valor de entre las más de 19.700 barajas con que cuentan los fondos del Museo de Naipes de la capital alavesa. Ésta es la primera ocasión en que los originales se muestran fuera de las instalaciones del edificio de la calle Cuchillería y de la fábrica fundada por Heraclio Fournier. La colección de barajas expuesta es la más valiosa que existe en la actualidad, a nivel mundial. Góticos Bajo el título Los naipes en el mundo y en el tiempo, la exposición incluye la baraja europea más antigua que se conserva en la actualidad. Se trata de una colección de naipes del último cuarto del siglo XIX ilustrada con dibujos góticos cuyos principales trazos fueron realizados a mano y sobre cuya procedencia existe cierta polémica. Unas fuentes la atribuyen a fábricas italianas en tanto que otras apuntan a una imprenta catalana como la autora de la colección. El director del museo, José Eguía, destacó asímismo cinco cartas sueltas del Tarot Visconti-Sforza, realizadas en el siglo XV y cuyo valor ronda los 50 millones de pesetas. Entre las barajas españolas figura un pliego de veinte cartas impresas en xilografía en el siglo XV y un ejemplar de la primera colección fabricada por Heraclio Fournier en Vitoria en 1868 y que ha dado origen al diseño de la actual baraja española. Diversos dibujos de las variaciones que a lo largo del tiempo ha experimentado la decoración inicial de la baraja completan esta sección. Una colección de naipes fechados a comienzos del siglo XIX y en la que se caricaturizan la situación del Estado, a los políticos del momento y el tránsito del absolutismo al liberalismo es otra muestra representativa de las cartas realizadas en España. Del mismo carácter político es otra baraja realizada en Inglaterra que refleja la oposición entre el protestantismo y el catolicismo. Grupos de cartas de Francia, Alemania, Austria, Bélgica, Holanda, Rusia, México, Japón, India, China y Persia completan el caracter universal de una exposición que, según aseguraron sus promotores, tiene la virtud de compendiar los ejemplares más notorios de la especialidad. Junto a las colecciones de barajas, Los naipes en el mundo y en el tiempo incluye diferentes utensilios utilizados en la fabricación de naipes desde el siglo pasado hasta la actualidad. Entre ellos destaca la prensa litográfica que utilizó el fundador de Fournier para realizar sus naipes en las primeras instalaciones que conoció la empresa creada en 1868 en la Plaza de España. Platos de porcelana ilustrados con naipes de la baraja española y planchas metálicas para imprimir las cartas son otros de los objetos presentes en la exposición. Todas los utensilios y barajas forman parte de los fondos del Museo de Naipes, que cuenta en la actualidad con 19.700 colecciones de cartas, la mayor parte de ellas de gran valor económico e histórico. Donaciones Aparte de las ya citadas e incluidas en la exposición, el espacio cultural alberga entre sus fondos toda la colección de la fábrica inglesa Thomas de la Rue, cuya adquisición en 1970 elevó al Fournier a la categoría de los mejores depósitos del mundo en la especialidad. También es de destacar la aportación de fabricantes italianos y franceses y la donación al centro de toda la producción de la empresa Heraclio Fournier, realizada en 1992. Desde su fundación, la empresa incrementó constantemente sus fondos mediante compras, donaciones y naipes de empresas absorbidas. Desde 1988, la Diputación de Alava, gestora del museo, ha reanudado la adquisición de colecciones a través de particulares, comerciantes y subastas. La institución foral adquirió en 1984 gran parte de los fondos acumulados en la empresa Fournier que pasaron a engrosar las propiedades del museo ubicado en el Palacio de los Arrieta. El empujó definitivo del centro se produjó en 1994 con la rehabilitación del citado edificio. La muestra se enmarca en el programa de actos culturales organizado con motivo de la conmemoración del 130 aniversario de la empresa Naipes Fournier, que ha contado con la colaboración de las instituciones alavesas y de la entidad financiera cuya sala alberga la exposición.

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