Gibraltar
Los laboristas podrían estar preparando la retirada de Gibraltar. La petición de un estatuto de dependencia por el primer ministro, Peter Caruana, ha sido aprovechada por el Foreign Office como una oportunidad para abrir la puerta a la soberanía compartida. Existe la esperanza de que un acuerdo en este sentido permita desbloquear una serie de temas conflictivos de la Unión Europea que no guardan relación entre sí, pero en los que España ejerce su derecho al veto.
España es una democracia pluralista y amiga del Reino Unido, pero en este tema se comporta a veces como un régimen dictatorial inseguro. Durante años, España hizo manifiestas sus ambiciones sobre Gibraltar mediante el acoso y la intimidación, cerrando el espacio aéreo y la verja que marca su frontera terrestre. Después, la pertenencia a la Unión Europea ha proporcionado a Madrid una nueva arma que le permite negociar su apoyo en otras cuestiones comunitarias ante la actitud más conciliadora de Londres hacia la colonia.
Sin embargo, España no tiene en absoluto derechos sobre la colonia. (...) Los habitantes de Gibraltar expresaron con suficiente claridad su rechazo a convertirse en españoles. Son étnicamente diferentes de sus vecinos y, aunque la mayoría son bilingües, el inglés es su idioma oficial. El futuro de la Roca debería haber quedado establecido sin ambigüedad por el referéndum de 1967.
30 de septiembre
