"Q-bit" en Benasque
La cuarta sesión del Centro de Física de Benasque, que tiene lugar del 5 al 25 de julio, está dedicada tanto a los aspectos teóricos como a los experimentales del campo de la Información y Computación Cuántica. Unos 60 científicos procedentes de 16 países se reúnen durante tres semanas en la escuela primaria de Benasque (Huesca). Se habilitan temporalmente despachos para todos los participantes en las aulas del colegio y pizarras en todos sus pasillos, se transforma el comedor en un aula de seminarios y el gimnasio pasa a albergar diez estaciones de trabajo de Silicon Graphics conectadas por una línea punto a punto con el Centro de Supercomputación de Cataluña (CESCA).La temática de la presente edición del Centro trata específicamente de Progress in Quantum Computing, Cryptography and Communication y Progress in Quantum Optics and Atomic Physics cuya coordinación científica corre a cargo de los profesores A. Ekert (Universidad Oxford) y I. Cirac (Universidad Insbruck). Entre los participantes del Centro se encuentran los líderes de los principales grupos de investigación de todo el mundo. Cabe destacar la presencia de A. Zoller (Universidad de Insbruck) y C. Bennett de IBM, generador de las ideas de teleportación cuántica. Figuran también entre los participantes N. Gershenfeld (Media Lab, MIT), R. J. Hughes y W. Zurek (Los Alamos National Laboratory), P. Knight (Imperial College), y G. Milburn (Universidad de Queensland).
La vitalidad del campo de la computación cuántica se ha hecho evidente en las charlas y discusiones que tienen lugar en el Centro. Se han debatido temas como las limitaciones de las técnicas de resonancia nuclear magnética (NMR), los problemas de las trampas de iones o las nuevas ideas sobre redes ópticas. El progreso teórico del campo no va a la zaga, profundizando en la comprensión de la utilización de Q-bit (bits cuánticos, creando nuevos algoritmos cuánticos o ideando protocolos de comunicación eficientes y seguros.
El funcionamiento del Centro de Física de Benasque se basa en un número muy reducido de charlas y mucho tiempo dedicado a discusiones de trabajo. Los resultados de las tres semanas de trabajo se miden en forma de nuevas colaboraciones científicas que se plasman en artículos de investigación.
