Brunner

Por las noticias necrológicas de EL PAÍS (3 de diciembre) me entero del fallecimiento de Guido Brunner, con el que hicimos buena amistad en nuestra juventud y del que he guardado muy grato recuerdo, especialmente cuando necesité de él por un muy grave suceso familiar mío.Me disgusta que el periodista de EL PAÍS saque a colación ciertos aspectos de la gestión de Brunner, aspectos intrincados que, al parecer, él calificaba de convolutos y de los cuales nada se había podido comprobar. Considero inaceptable, por inoportua, la indelicadeza en ocasión de tan triste circunstancia. Es civilizado respetar a los muertos.