Suiza crea un fondo de solidaridad mundial como compensación por el uso del oro nazi
Las autoridades suizas han terminado por claudicar ante las feroces críticas internacionales emitidas durante estos últimos meses contra su política durante la II Guerra Mundial. El presidente de la Confederación Helvética, Arnold Koller, anunció ayer la creación de una "fundación suiza de solidaridad", que empezará a funcionar con unos 7.000 millones de francos suizos (cerca de 700.000 millones de pesetas) financiados por el Banco Nacional Suizo (BNS) para socorrer a las víctimas de la pobreza, las catástrofes, genocidios y otras violaciones de los derechos humanos graves, así como a las del Holocausto, tanto en Suiza çcomo en el extranjero. Asimismo, el BNS aportará otros 100 millones de francos al fondo constituido en enero por los tres mayores bancos privados suizos, al que aportaron una cantidad similar para ayudar a las víctimas del nazismo y a los herederos que lo necesiten.De momento, el rumor de que esa fundación será subvencionada con la venta de oro hizo caer ayer el precio de ese metal en el mercado de Londres. La onza (31,103 gramos) cerró a 352,25 dólares, 7,75 menos que el día anterior.
Por otra parte, ayer se supo que Alemania entregó más de 50 millones de pesetas y una tonelada (le oro al Gobierno del general Francisco Franco cuando cerraron su embajada en Madrid al acabar la II Guerra Mundial, sin que España informara a los aliados, informa Rafael Moreno, de la agencia Efe. Sin embargo, el servicio de espionaje estadounidense descubrió la operación al interrogar en 1945 al último contable de la representación alemana, H. Habermann, y a un miembro del servicio de espionaje militar alemán en España (la famosa Abwehr) de apellido Minameyer.
Las declaraciones de estos dos alemanes, así como otros documentos oficiales, fueron encontrados por Efe en los Archivos Nacionales de Estados Unidos, pero no aclaran definitivamente el destino del oro, reclamado en 1955 por Alemania Occidental.
