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EDUCACIÓN

Nace el 'manifiesto de Delfos' en defensa de la cultura clásica

"Desde Delfos, donde se nos habla de la grandeza del hombre y sus problemas en relación consigo mismo, con la sociedad y con el cosmos, queremos hacer pública nuestra denuncia contra los responsables de que se haya privado a las nuevas generaciones de las verdaderas raíces del hombre universal sin tiempo ni edad". He aquí una parte del corazón del Manifiesto de Delfos en defensa de la cultura clásica frente a la reforma (LOGSE), que reduce el tiempo de esta formación en las aulas de secundaria.Firmado por más de 30 profesores españoles de secundaria y universidad que han asistido al seminario La enseñanza del griego antiguo y la civilización griega clásica, organizado por el Centro de Cultura Europeo de Delfos, al pie del santuario de Apolo.

Garantizar, y no privar, a todos los alumnos el derecho a una formación humanística, convertir la asignatura de Cultura Clásica en obligatoria, al menos en un curso de la ESO, y asegurar la presencia de al menos un profesor de latín y otro de griego en cada centro, son una parte de los mínimos que los Profesores reunidos en Delfos exigen, de la Administración educativa "para que estas materias puedan ser impartidas adecuadamente de modo que estos profesores formen parte de las comisiones pedagógicas de los centros en todo el territorio español.

El Manifiesto de Delfos reclama, además, una dotación económica unos medios que igualen las condiciones de las asignaturas humanísticas a las de los demás departamentos en los institutos e insiste en la conveniencia de retrasar la implantación adelantada del cuarto curso de la LOGSE "para que, tras una reflexión serena y responsable, se pueda organizar de forma más coherente la oferta de asignaturas optativas con el fin de dar una mejor formación a nuestros alumnos. Queremos, asimismo, que en la totalidad del Estado español se asigne un lugar digno a las asignaturas de latín y griego en el bachillerato de humanidades", dice el texto.

El documento, expresa su alegría porque "nuestras voces ya han sido oídas en otros países donde los estudios clásicos vuelven a ser un centro en formación de las nuevas generaciones".

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