Dos dibujos inéditos de Picasso aportan nuevos datos sobre el 'Guernica'

Dos dibujos inéditos de Pablo Picasso, relacionados con los grabados de Sueño y mentira de Franco, están aportando nuevos elementos para conocer los meses previos a la elaboración del mural Guernica, presentado en junio de 1937 en el pabellón español de la Exposición Internacional de París. Los dos dibujos, propiedad de un coleccionista suizo, se presentaron por primera vez el pasado mes de febrero en la feria Arco 94, en la caseta de la galería Guillermo de Osma. El precio de cada uno era de veinte millones de pesetas.

Los dos trabajos ya han sido objeto de un estudio por parte de Teresa Posada, conservadora del Museo del Prado. Este estudio se publicará en el próximo número del Boletín del Museo del Prado, donde se aportarán todos los datos.Los dos dibujos, sin fecha ni firma pero autentificados por una hija del pintor, Maya, siguen en manos del coleccionista suizo tras su paso por Arco 94. El galerista Guillermo de Osma señala que estos apuntes de estudio despertaron la curiosidad, pero el elevado precio puesto por el propietario, 20 millones por dibujo, alejó a los interesados. Fuentes del Museo Reina Sofía, que tiene en depósito el legado Picasso, que incluye los dos grabados de Sueño y mentira de Franco, confirmaron que también se consideró muy alto el precio de venta.

Picasso realizó las dos hojas de Sueño y mentira de Franco el 8 y el 9 de enero de 1937, según se lee a la inversa, sin tener en cuenta la escritura sobre la plancha, aunque la segunda se alargó hasta el 7 de junio. Cada hoja contiene nueve viñetas o aleluyas, en aguafuerte y aguatinta, con una "visión feroz" sobre Franco y la guerra civil. En un principio se pensó en convertir las viñetas en postales y venderlas en el pabellón español de la Exposición Internacional de París como ayuda a la República, pero al final se convirtió en una carpeta junto con un poema y una portada de Picasso.

Legado almacenado

Los dos grabados forman parte del legado Picasso, perteneciente al Museo del Prado y en depósito en el Museo Reina Sofía desde el traslado del Guernica. En el Casón del Buen Retiro se expusieron junto a los 60 dibujos y pinturas en torno al Guernica, pero en el Reina Sofía se encuentran en los almacenes, "por falta de espacio", según fuentes del museo.La conservadora Teresa Posada -que con anterioridad ha estudiado la influencia de la película El acorazado Potemkin, realizada en 1925 por el cineasta ruso S. M. Eisenstein, en el proceso del Guernica- ha realizado el primer estudio de los dos dibujos propiedad del coleccionista suizo, que publicará en el próximo número del Boletín del Museo del Prado. Posada considera que el interés de estos apuntes se centra en los preparativos para los grabados de Sueño y mentira..., que hasta ahora se han considerado un ejemplo de la espontaneidad del artista sobre la plancha y del seguimiento de algunos rasgos que se van a fijar posteriormente en el Guernica. Otra serie de referencia para el Guernica son los grabados de la minitauromaquia, de 1935.

La historiadora de arte Josefina Alix montó la exposición sobre el pabellón español en la exposición de París de 1937, que, además del mural de Picasso, acogió la obra de artistas como Joan Miró, Julio González y Calder, entre otros. Alix considera que siempre tiene interés conocer los papeles íntimos de Picasso, aunque no encuentra en los dos dibujos elementos iconográficos que pasen directamente al Guernica. En cambio, señala algunos rasgos de Sueño y mentira de Franco, como la "figura repugnante" del dictador, el busto de la República, el toro, el caballo y las mujeres llorando. Josefina Alix afirma que el bombardeo de Gernika del 26 de abril de 1937 no es determinante en el mural sino la caída en febrero de Málaga, su ciudad natal, y, sobre todo, la presión de sus amigos que en esos momentos construyen el pabellón y le enseñan el espacio para su obra. "Picasso rara vez es impulsivo. Hay temas cuyas referencias se encuentran 20 años antes", dice Josefina Alix.