Un millón de escolares comenzarán en septiembre la nueva enseñanza primaria

Cualquier maestro podría organizar las clases de la nueva enseñanza primaria sólo con los materiales didácticos que el Ministerio de Educación ha empezado a enviar a los colegios, "sin necesidad de contar con manuales escolares específicos" según manifestó ayer el titular del departamento, Javier Solana. Alrededor de un millón de niños comenzarán en septiembre próximo dicha nueva etapa educativa.

Las enseñanzas de los dos cursos del primer ciclo de educación primaria sustituirán a las de los dos primeros cursos de la actual EGB. Con ellos comenzará a implantarse el nuevo periodo de educación obligatoria configurado en la LOGSE. Esta etapa educativa obligatoria, que hoy comprende ocho cursos, constará de diez años académicos, que los escolares que en septiembre próximo tengan seis y siete años de edad van a recorrer en su integridad. La enseñanza primaria, dividida en tres ciclos de dos cursos cada uno, dará paso a la nueva enseñanza secundaria, compuesta también por dos ciclos de dos cursos cada uno.

El ministro Solana presentó ayer los materiales didácticos para orientar al profesor sobre los contenidos de las diversas áreas de conocimiento, los objetivos educativos de cada curso, métodos de evaluación y técnicas didácticas tanto para la nueva educación infantil como para la enseñanza primaria.

Dichos materiales contienen la información general que permitirá a los equipos educativos de los centros establecer la programación de las enseñanzas ciclo a ciclo y cómo abordar aspectos tan variados del proceso de enseñanza-aprendizaje como la función tutorial sobre los alumnos, la individualización de la enseñanza o los problemas de aprendizaje que surjan.

Los materiales sobre cada una de las áreas de conocimiento (Lengua Castellana y Literatura, Lenguas Extranjeras, Conocimiento del Medio, Matemáticas, Educación Física y Educación Artística) contienen, además de la información específica, detalladas referencias bibliográficas a partir de las cuales el profesor pueda preparar los programas generales del curso y de cada unidad didáctica.

Solana considera que estos materiales constituyen un bagaje suficiente para que los profesores que han de impartir el próximo curso la nueva enseñanza acometan con pleno conocimiento de causa su trabajo dentro del espíritu de la reforma que pretende la LOGSE.

Manuales escolares

Entre las numerosas críticas que en su día se formularon contra la implantación de la gran reforma precedente, la de la ley General de Educación de 1970, destaca el enorme grado de desconocimiento inicial de los maestros que habían de aplicarla. Llegó a afirmarse que la mayoría de los profesores descubrió aquella reforma a través de los manuales escolares elaborados por las editoriales especializadas. En este sonido Solana subrayó que el ministerio está colaborando con los editores para que puedan tener a tiempo los textos que servirán de ayuda a los profesores. 'Tos libros de texto", según el ministro, "pueden ser, y de hecho son, una gran ayuda para el profesor", pero ponderó la importancia y riqueza de los materiales que se han comenzado a enviar a los profesores. Hasta tal punto que, según dijo, "un maestro bien formado, y todos lo están, podría, sólo con ellos, organizar sus clases sin necesidad de los manuales habituales". Estos materiales realizados por Educación y Ciencia se envían sólo a los centros públicos y concertados dependientes de la gestión directa de la Administración central.