El presidente de Pakistán destituye a Bhutto
El presidente de Pakistán, Gulam Ishaq Jan, ordenó ayer la disolución del Parlamento, destituyó a la primera ministra, Benazir Bhutto, nombrando en su lugar al jefe de la oposición, Gulam Mustafá Jatoi, y decretó el estado de emergencia. También convocó elecciones generales para el 24 de octubre. Jan justificó el relevo por "la corrupción, el abuso de poder y el nepotismo" del Gobierno de Bhutto, la cual rechazó estas acusaciones y calificó la decisión de "golpe de Estado ilegal e inconstitucional".
En el decreto presidencial que impuso el estado de emergencia se afirma que el presidente "está convencido de que la seguridad de Pakistán está amenazada por una agresión exterior y por la agitación interior que los gobiernos provinciales no están en condiciones de controlar".Poco antes el presidente paquistaní había abierto abruptamente una profunda crisis política en su país al declarar que: "Yo, Gulam Ishaq Jan, presidente de la República Islámica de Pakistán, en ejercicio de los poderes que me confiere la Constitución, disuelvo la Asamblea Nacional con efectos inmediatos y ordeno el cese de la primera ministra y su Gabinete".
La actividad política era febril en Islamabad desde la semana pasada. El sábado, el jefe de la oposición, Jatoi, anunció que plantearía en el Parlamento una moción para que la Cámara retirara su confianza en la primera ministra y la obligara a dimitir. La propuesta de Jatoi tenía posibilidades de éxito por las escisiones larvadas que amenazan al Partido Popular de Pakistán (PPP), de Benazir Bhutto. Sin embargo, la decisión presidencial pareció coger por sorpresa al Gobierno, cuyo ministro de Asuntos Parlamentarios, Khawaja Tarik Rahim, insistía en que "no se esperaban novedades" sólo una hora antes de la declaración del presidente Jan.
Gulam Ishaq Jan manifestó a los periodistas, tras anunciar el cese de Bhutto y su Gabinete, que "el Gobierno ha violado las disposiciones de la Constitución y las leyes". "Las autoridades judiciales han sido públicamente ridiculizadas, y la autoridad, el dinero y los organismos gubernamentales han sido utilizados con fines políticos y personales".
La función pública había sido, según Jan, "minada por el desprecio con que se han incumplido las disposiciones constitucionales", y Bhutto había ejercido el poder "sin el preceptivo conocimiento del Gobierno". Jan señaló que las supuestas violaciones de la Constitución por parte de Bhutto y su partido se habían producido en sus relaciones y acuerdos con los partidos provinciales y en diversos casos de corrupción. El presidente no citó, sin embargo, casos concretos.
Inmediatamente después de conocer su destitución, Benazir Bhutto rechazó las acusaciones del presidente y calificó su decisión de "golpe de Estado ilegal e inconstitucional", sugiriendo además que le había sido impuesta por el Ejército. Bhutto añadió que confiaba en obtener de nuevo la mayoría en las elecciones de octubre.
El Gobierno de Bhutto se había visto seriamente deteriorado por su incapacidad para controlar los enfrentamientos étnicos registrados a lo largo de todo este año entre la población sindi y la mohajir en la provincia de Sind, precisamente la provincia natal de la ex primera ministra.
El líder de la coalición Partidos Combinados de Oposición (PCO), Mustafá Jatoi, se encargará de formar un Gobierno provisional hasta las elecciones.
