_
_
_
_
_

Procesados cinco ex directivos del Banco de Descuento, contra los que se querelló el Fondo de Garantía de Depósitos

Cinco de los antiguos administradores del Banco de Descuento, acusados de un delito continuado de apropiación indebida y otro de falsificación de documento mercantil, han sido procesados por el juez de instrucción número 7 de Madrid, quien ha decretado la prisión provisional de Angel Paradejordi Romero, Enrique García-Ramal y López de Haro, Jorge López-Dóriga y Tovar y Vicente de Miguel Lasanta, así como la de Diego de Prado y Colón de Carvajal, quien podrá eludir el ingreso en prisión mediante el pago de una fianza de medio millón de pesetas. La decisión judicial ahora adoptada es consecuencia de la querella presentada por los nuevos administradores, que se hicieron cargo del Banco de Descuento en noviembre de 1981, en representación del Fondo de Garantías de Depósitos.

En el auto de procesamiento -según la información publicada ayer por Diario 16- el juez Epifanio Legido decreta la prisión provisional sin fianza de los cuatro primeros procesados citados, mientras que, para Diego Prado, dada su situación personal tras el secuestro de que fue víctima en marzo de éste año por ETA, estima aconsejable el señalamiento de una fianza de 500.000 pesetas, para quedar en libertad provisional.Diego Prado ocupó el cargo de presidente del Banco de Descuento, hasta que se hizo cargo del mismo el Fondo de Garantías de Depósitos, tras la auditoría encargada por dicha entidad, que descubrió un agujero valorado inicialmente en unos 9.000 millones de pesetas. Paradejordi fue vicepresidente y consejero delegado del banco; García-Ramal y López de Haro, hijo del exministro franquista de Relaciones Sindicales, fue consejero director general; López-Doriga desempeñó el cargo de vocal del consejo de administración, y Vicente de Miguel Lasanta fue director general.

La iniciativa de la presentación de la querella correspondió a Ignacio González Cagigas, encargado por el Fondo de Garantías de Depósitos de la presidencia del Banco de Descuento, y a su director general, José María González-Cobos Dávila. En el acta final de la junta general de accionistas celebrada el 30 de junio de 1983 se recogió que continuaba su curso "la investigación judicial sobre las operaciones concretas que han producido al banco importantes quebrantos patrimoniales".

Inhibición iudicial

El Fondo presentó inicialmente ante el Juzgado de Instrucción número 8 de Madrid la querella contra las cinco personas ahora procesadas. Ésta no prosperó, al inhibirse el titular del juzgado, entre otras razones, por su condición de cliente del Banco de Descuento. En cambio, la querella formulada ante el Juzgado número 7 de Madrid, posteriormente ampliada con una denuncia ante la Brigada de Estafas, que incrementaba el número de querellados, originó la apertura de un sumario y la detención el 2 de marzo de 1982 de Diego de Prado, junto con otros dos directivos del banco: Juan López-Dóriga y Federico Bonet. Poco después, los detenidos fueron pues tos en libertad incondicional sin procesamiento.El motivo esencial de la querella presentada por los representantes del Fondo de Garantías de Depósitos, fue el hallazgo de indicios suficientes de que el anterior equipo de administradores del Banco de Descuento había cometido falsedades en balances y ocultado la situación de quiebra que arrastraba el banco, como mínimo, desde mediados de los años setenta. También se denunciaban revalorizaciones ficticias de inmuebles y concentraciones de riesgos fallidos en sociedades de los propios consejeros.

En el auto de procesamiento ahora conocido, el juez estima que de las diligencias practicadas hasta el momento se deduce que con anterioridad al 17 de noviembre de 1981, los procesados desviaron del Banco de Descuento, con específico ánimo de lucro y valiéndose de los puestos que ocupaban, no menos de 5.700 millones de pesetas, a través de múltiples procedimientos.

El documento judicial especifica algunos de los mecanismos empleados, como la disposición de fondos del banco por parte de los consejeros, quienes los extraían de una caja B, nutrida con dinero de la caja A, y finalmente los ingresaban a su nombre en otros bancos privados, sustituyendo los fondos extraídos por simples anotaciones o vales.

16 'desviaciones'

De entre las 16 desviaciones citadas en el auto judicial figuran 27 millones de pesetas, ingresados en octubre de 1979 a favor de Diego de Prado en el Banco de Madrid y en el de Bilbao; otros 38 millones ingresados ese mismo mes a favor de García-Ramal en la Banca Mas Sardá; 25 millones del Banco de Levante, ingresados el 21 de enero de 1980 en la cuenta de López-Dóriga en el Banco Zaragozano, e igual operación, por importe de otros 15 millones realizada el 30 de abril del mismo año.El procesamiento de los cinco ex directivos del Banco de Descuento se justifica también en la alteración de la contabilidad del banco por parte de los encausados, de modo que, antes de elaborar los balances que debían remitirse al Banco de España, se distribuían por las distintas rúbricas de los libros de contabilidad las partidas que carecían de justificación.

Asimismo, se acusa a los cinco procesados de confeccionar letras de cambio a nombres de librados, libradores y aceptantes ficticios, y de incluir en la cartera de valores cifras de dinero sin justificación. Otros hechos delictivos constatados en la resolución judicial son las operaciones de compra por el Banco de Descuento de las acciones de los procesados, cuando carecían de valor en el mercado.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_