La NBA suspende indefinidamente a Draymond Green tras una nueva expulsión

Nuevo correctivo a Draymond Green. La NBA ha suspendido indefinidamente al pívot de los Golden State Warriors desde la noche de este miércoles por su “repetida historia de actos antideportivos”. El jugador fue expulsado la noche del martes del partido contra los Phoenix Suns tras golpear en la cara al bosnio Jusuf Nurkić. La liga pone alto el listón para que el jugador vuelva a las canchas. “Necesitará cumplir con ciertos requisitos y condiciones de su equipo para que regrese”, ha informado la NBA en un comunicado.

Green, un líder volcánico, recibió la noche del martes una segunda falta fragrante cuando el partido contra los Suns llevaba cuatro minutos de juego en el tercer período. En la jugada, Nurkić cubre a Green, de espaldas a la canasta, que busca recibir el pase del novato Brandonin Podziemski, que está por poner en juego la pelota. Las cámaras captan cómo Green se gira y pega al europeo en la mandíbula con el puño derecho. El golpe derriba al bosnio, quien cae boca abajo a la lona. Los Warriors perdieron 119-116 frente al equipo de Kevin Durant. Green se disculpó con su rival en una conferencia después del partido y dijo que solo estaba intentando que los árbitros le señalaran una falta en su favor.

No es el único incidente protagonizado por Green, un jugador conocido por su fortaleza física y su juego rudo. El número 23 de Golden State fue suspendido cinco partidos el mes pasado después de aplicar un candado al francés Rudy Gobert en un partido contra Minnesota. Gobert había tratado de parar una pelea entre dos jugadores cuando Green corrió hacia él para lanzarle el brazo alrededor del cuello. La suspensión fue merecida, de acuerdo a Steve Kerr, el entrenador de los Warriors. “Draymond estuvo mal. Él lo sabe. Está mal”, dijo Kerr entonces.

En abril de este año, en plenos playoffs, Domantas Sabonis sacó de quicio a Green, quien dio un pisotón al lituano cuando estaba en el piso. El exabrupto hizo que el defensivo de Golden State fuera expulsado un partido en plena serie contra Sacramento, cuando su equipo intentaba conquistar de nueva cuenta el Oeste, que dominan desde 2015. Ya desde esta primavera comenzó a escucharse en la liga que Green no está bien. El pívot ha sido expulsado de 11 de los primeros 23 partidos de los Warriors en la actual temporada.

La nueva suspensión de Green ha hecho sonar las alarmas del equipo, que ha conquistado cuatro campeonatos y seis títulos de conferencia desde 2015. El jugador se reunirá mañana con Mike Dunleavy, el gerente de Golden State y su agente, Rich Paul, para comenzar a discutir un plan para el retorno a las canchas, según Adrian Wojnarowski, un periodista de la ESPN con profundas fuentes dentro de la NBA. Nadie se ha atrevido a especular una fecha de regreso para el problemático pívot.

Su ausencia, no obstante, significan malas noticias para los Warriors de Steph Curry. El equipo está en pleno relevo generacional con los jóvenes Jonathan Kuminga, Moses Moody y Podziemski. El histórico base, Klay Thompson y Green son los remanentes de la legendaria franquicia que ganó anillos en 2015, 2017, 2018 y 2022. Esta temporada parece difícil que se cuelen en los playoffs. El equipo ha protagonizado un atribulado arranque con un récord de 10 triunfos y 13 derrotas. Han perdido 11 de los últimos 15 partidos y ocupan el puesto once de la conferencia, un sitio extraño para una familia tan ganadora como esta.

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