La Librería Rodríguez, especializada en literatura taurina, se traslada a la plaza de Las Ventas
El coso madrileño acoge una de las más prestigiosas colecciones sobre la tauromaquia, con más de 5.000 libros catalogados
La emblemática Librería Rodríguez, especializada en literatura taurina, cuenta a partir de ahora con un espacio propio en la plaza de toros de Las Ventas después de que su dueño se viera obligado a cerrar su histórica tienda en la madrileña calle del Marqués de Zafra.
De algún modo, esta iniciativa recoge el testigo del librero Matías Vegas, ‘el torero de las letras’ de la plaza, fallecido en abril de 2020, quien durante años mantuvo una tienda portátil en los bajos de las escaleras que daban acceso al tendido alto del tendido 1. Allí, Vegas montaba cada día de festejo su particular estantería en la que ofrecía libros nuevos y antiguos, de reciente edición y ya descatalogados, manuales, biografías, publicaciones extranjeras, carteles…
Aquel rincón quedó vacío, y ahora, a pocos metros de allí, la Comunidad de Madrid, a través del Centro de Asuntos Taurinos (CAT), ha cedido por cinco años a la Librería Rodríguez un emplazamiento situado en el acceso 1 (entre el Museo Taurino y el patio de caballos), que ya está abierto al público a diario y los días de festejos lo estará hasta la finalización de los mismos.
Según señala el CAT en un comunicado, con esta iniciativa la plaza acogerá en su recinto una de las más prestigiosas colecciones sobre la tauromaquia, con más de 5.000 libros catalogados.
Entre las joyas y tesoros se encuentran carteles en seda natural muy bien conservados y ejemplares que datan de 1888, como los “Anales del toreo” o la revista “Sol y Sombra” que nació en 1897.
Los turistas, aficionados y bibliófilos también encontrarán en ese rincón volúmenes relacionados con la ganadería, agricultura o la gastronomía, entre otros, algunos de ellos traducidos a varios idiomas como el inglés, francés o portugués y que pueden adquirirse de forma física o a través de su página web.
La Librería Rodríguez nació en 1935 con una vocación literaria especializada en obras antiguas. En 1970 dio un giro de la mano de quien heredó su apellido, Estanislao Rodríguez, que descubrió el interés del público por todo lo relacionado con el coleccionismo taurino.
Después de cuatro generaciones, actualmente es Carlos Ballesteros Rodríguez, bisnieto de su fundador, quien trabaja y ha digitalizado el oficio de librero para adaptarse a los tiempos.
