Las casas empleadas en Sri Lanka que usarán los refugiados en Madrid

Dos centenas de los refugiados que penan el invierno de Madrid sin un techo que les cobije podrán instalarse en 20 viviendas prefabricadas que cederá próximamente el Gobierno regional al Ayuntamiento de la capital. Así lo ha anunciado este jueves en la Asamblea Isabel Díaz Ayuso, sin especificar cuándo estarán disponibles las casas ni dónde las instalará el alcalde, José Luis Martínez Almeida. Las viviendas son del mismo modelo que las 80 que envió la Comunidad en 2005 desde Las Rozas a Sri Lanka por barco para atender a las familias desplazadas por el maremoto que sacudió el sur de Asia. Aquel asentamiento se bautizó Villa Madrid, costó 4,5 millones de euros y atendió a cientos de desplazados en una situación desesperada. Más de un decenio después, y a falta de más instalaciones públicas habilitadas, el mismo tipo de casa se instalará en el corazón de la capital de España. [Fotogalería: las casas prefabricadas que ofrece la Comunidad de Madrid]

"Ya hemos abierto un centro en Cercedilla y vamos a abrir dentro de poco otro en Casa de Campo y en Los Molinos”, ha dicho la presidenta de la Comunidad. “Quiero anunciar una medida que vamos a hacer entre el alcalde y yo, con la Consejería de Vivienda y que es donar 20 casas prefabricadas para que 200 personas puedan en muy poco tiempo estar en las mejores condiciones".

El Gobierno de Esperanza Aguirre mandó a Sri Lanka 80. Ahora se emplearán 20. El PSOE denunció en 2006 que las tormentas tropicales habían causado destrozos graves en la mayoría de viviendas, porque no estaban preparadas para el clima asiático. Además, según los socialistas, se construyeron en la selva, sin base de cimentación y sin ningún tipo de urbanización, luz, agua o alcantarillado, lo que afectó a su estructura. Las que ahora se harán en Madrid tendrán una base cimentada sobre colectores y canalizaciones, según el Gobierno. 

¿Cómo son las viviendas? Son casas de 60 metros cuadrados, con tres habitaciones, cocina, salón y baño, completamente equipadas, según ha detallado la consejería de Vivienda en un comunicado en el que también especifica que será el Ayuntamiento quien corra con los gastos de su transporte e instalación.

"Los refugiados se merecen viviendas dignas y se merecen además servicios adecuados tanto educativos como sociales que puedan desarrollar su vida en esta comunidad, una vez que está claro que tienen su estatuto como personas refugiadas", ha criticado Purificación Causapié, diputada del PSOE. 

"Deducimos que la situación que veníamos denunciando desde hace semanas, de personas que estaban en situación de refugio en nuestro país y que estaban durmiendo en la calle, era una situación evitable", ha comentado Pablo Gómez Perpinyá, diputado de Más Madrid. "¿Por qué la señora Ayuso y el señor (alcalde de Madrid, José Luis) Martínez-Almeida han tenido que hacerles pasar este calvario?".

"La Comunidad de Madrid lo que tiene que tener es un presupuesto importante para viviendas sociales para personas que estén en situación de especial vulnerabilidad", ha rematado Rocío Monasterio, la portavoz de Vox. "20 casas prefabricadas no resuelven el problema", ha seguido. Y ha rematado: "Es una tomadura de pelo".

"Esperamos que no estén hablando en serio", ha lamentado Isabel Serra, de Unidas Podemos IU Madrid en Pie. "Reiteramos que es la Comunidad de Madrid la que tiene las competencias, lo avala una sentencia del Supremo reciente, en garantizar vivienda, servicios sociales, sanidad, educación, a las personas solicitantes de asilo y a los refugiados", ha profundizado. "Esperamos que no se toman a risa la situación por la que están pasando muchísimas familias que tienen niños, que están desprotegidos y que no se están respetando sus derechos humanos".

El Ayuntamiento espera que las primeras viviendas estén listas para usarse a principios de año. Su intención, según ha explicado el delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social del Ayuntamiento de Madrid, Pepe Aniorte, es que sea una instalación fija en el que los ocupantes de las plazas roten.