El jefe de la célula desarticulada en España esperaba órdenes para un atentado suicida

La célula de terroristas integristas musulmanes desarticulada en España tenía entre sus misiones la captación y formación de nuevos activistas -sobre todo de ex militantes del GIA argelino- y al menos uno de sus miembros estaba en proceso de mentalización para convertirse en suicida. El principal contacto del grupo en Europa, Nizar Trabelsi, detenido el día 13 en Bélgica ya estaba preparado para cometer atentados sacrificando su vida contra una sinagoga o contra el cuartel general de la OTAN en Bruselas, según fuentes de la investigación. No consta, en cambio, que proyectasen acciones armadas en territorio español.

Los análisis preliminares de la documentación requisada -algunas bolsas con papeles seguían cerradas ayer- ha revelado detalles sobre las conexiones, objetivos y forma de trabajar del grupo. Al menos uno de los miembros de la célula durmiente (de descanso a la espera de instrucciones) supuestamente relacionado con Osama Bin Laden se estaba preparando para realizar un atentado suicida, según explicó ayer en Bruselas el ministro del Interior, Mariano Rajoy, aunque no hay datos que puedan probar que la acción suicida fuera a cometerse en España.

'Se está investigando la posibilidad de que uno de los terroristas detenidos ayer estuviera a punto de convertirse en terrorista suicida, según refleja él mismo en un diario personal que le ha sido intervenido', precisó Rajoy. El dietario de Boualem incluye además fechas de citas, los contactos del grupo en varias ciudades europeas o los itinerarios de viajes entre Francia, España, Reino Unido, Irlanda y Argelia, entre otros datos.

Los investigadores están escudriñando, con ayuda de traductores de árabe, éste y otros libros de anotaciones, especialmente las de los contactos del grupo en al menos 10 localidades europeas, incluidas Bilbao, Tudela, Cascante y Madrid. No se descartan nuevas detenciones.

El comando era un elemento clave de la logística del Grupo Salafista para la Predicación y el Combate, y tenía entre sus diferentes misiones la captación de activistas para enviarlos al subaparato de reclutamiento, que, según indicó ayer Juan Cotino, director general de la Policía, se denomina Mactad al Gedamat. La leva pasaba por la exhibición a los aspirantes de vídeos radicales que muestran atentados, degollamientos, así como a futuros suicidas aclamados por extremistas islámicos y otras soflamas para acudir a la lucha.

Cotino, que ayer presentó parte del material confiscado, agregó que el grupo fabricaba documentos falsos y compraba material de alta tecnología. De hecho, ya tenía en su poder tres visores nocturnos y una colección de documentos falsos de varias nacionalidades y para distintas acreditaciones. Además, la célula tenía el encargo de proveer a los miembros de la red integrista europea de casas y pisos en alquiler para esconderse y de coches para sus desplazamientos.

Los investigadores están también interesados en las anotaciones en dietarios y diarios que supuestamente hablan de objetivos de futuros atentados del Grupo Salafista marcados presuntamente por Bin Laden. Las fuentes consultadas explicaron que existe la certeza de que el tunecino Nizar Trabelsi ya estaba preparado para cometer una acción suicida, presumiblemente contra alguna sinagoga radicada en Europa o bien contra el Cuartel General de la OTAN en Bruselas.

Los documentos encontrados en su poder fueron los que revelaron estos planes y sus conexiones con la célula española, lo que motivó que Bélgica enviara una comisión rogatoria a España. Trabelsi era el enlace del grupo y se sabe que mantuvo reuniones en España a caballo de los meses de marzo y abril. 'Pero no tenemos ningún dato de que aquí estuvieran preparando un atentado', templó Cotino.

Los seis supuestos miembros del comando permanecen en las dependencias de la Comisaría General de Información y pasarán a disposición judicial en las próximas 48 horas. Los otros 10 arrestados por su relación con los anteriores -vivían en la misma casa o se conocían en el barrio- ya han sido puestos en libertad. El núcleo duro está acusado del delito genérico de pertenencia a banda armada. No obstante, inicialmente no se les imputa ningún hecho criminal cometido en España, según fuentes de la Audiencia Nacional. Cotino reveló que se está a la espera de que una comisión rogatoria de la justicia belga acuda a España para interrogar a los detenidos.

El ministro argelino de Cooperación, Abdeliz Ziari, de visita ayer en España, confirmó que su Gobierno había alertado hace tiempo de la presencia aquí de miembros del Grupo Salafista. 'No nos sorprende, ya que estas detenciones son fruto de la estrecha colaboración existente entre las autoridades españolas y argelinas. Ahora esto es la prueba de que tenemos razón', declaró a Europa Press.