Un joven muere en EE UU al dispararse el precio de su inhalador para el asma hasta los 500 dólares, según una demanda
Los padres han denunciado por negligencia a la aseguradora sanitaria y la farmacia ante un tribunal federal de Wisconsin
Un joven de Wisconsin murió de un ataque de asma después de que el precio de su inhalador se disparara casi 500 dólares, según una demanda presentada por sus padres en un tribunal federal del Estado. Cole Schmidtknecht, de 22 años, padecía esa enfermedad crónica, que trataba con un inhalador que le costaba, según la denuncia, 66 dólares de copago al margen de la cantidad cubierta por la aseguradora médica. Pero el precio se disparó hasta los 500 dólares, según la demanda, cuando el año pasado OptumRx, filial de United Health Group —principal aseguradora de salud de EE UU—, dejó de cubrir el inhalador que el joven había usado durante una década. Las compañías de seguros médicos en EE UU han sido objeto de un importante escrutinio en los últimos meses tras el asesinato del consejero delegado de UnitedHealthcare, Brian Thompson, en un crimen que afloró el malestar de miles de asegurados.
El 10 de enero de 2024, Schmidtknecht fue a su farmacia local Optum Rx-Walgreens en Appleton (Wisconsin), confiado en recibir su receta habitual, cuando fue informado por personal de Walgreens, una de las mayores cadenas de farmacias de EE UU, de que el seguro ya no cubría el medicamento y que le costaría 539,19 dólares. El paciente no había recibido avisos previos ni la posibilidad, una vez en el mostrador de la farmacia, de una alternativa genérica. Walgreens le informó de que “no había alternativas más baratas ni medicamentos genéricos disponibles”, dice el texto de la demanda.
A United Health Group pertenecía Brian Thompson, consejero delegado de UnitedHealthCare, otra de sus filiales, cuando fue asesinado a sangre fría a primeros de diciembre en Manhattan (Nueva York) por un joven que dijo haber actuado en represalia por los abusos y la corrupción de las aseguradoras sanitarias, un lucrativo negocio en EE UU. El crimen afloró el descontento de miles de clientes de estas compañías por la racanería de las coberturas, incluida la anestesia en intervenciones quirúrgicas, cuando no por su manifiesto rechazo a la hora de pagar actos médicos indispensables clínicamente. Aunque varios sondeos mostraron entonces que un alto porcentaje de estadounidenses atribuye a los planes de cobertura médica parte de la responsabilidad en el asesinato del consejero delegado de UnitedHealthcare, la demanda a OptumRx por la muerte del joven de Wisconsin es el primer caso legal en que se plasma el descontento de los asegurados con sus pólizas.
La demanda explica que el joven abandonó la farmacia sin medicamento alguno y que durante los cinco días siguientes “luchó por respirar, con el único recurso disponible de su viejo inhalador de rescate [para casos de emergencia] para remediar sus síntomas”, según su familia. El 15 de enero de 2024 fue trasladado a urgencias a causa de un grave ataque de asma por un compañero de piso, pero “quedó inconsciente y sin pulso” en el coche antes de llegar al hospital. Tras ser sometido a reanimación cardiopulmonar en urgencias, pasó varios días en la UCI sin despertar. El 21 de enero fue declarado muerto tras retirársele el soporte vital.
Sus padres han demandado a Walgreens, a su empresa matriz Boots Alliance y a Optum Rx, la gestora de prestaciones farmacéuticas, por negligencia. “El demandado Optum Rx tenía la obligación de no inflar artificialmente los precios de los medicamentos recetados como Advair Diskus [la marca del inhalador] para los pacientes asegurados, incluido Cole Schmidtknecht, haciéndolos tan inasequibles que los pacientes no podían adquirir los medicamentos que sus médicos les prescribían”, subraya la demanda.
En una declaración a ABC News, Optum Rx dijo que Schmidtknecht optó por la receta de un genérico para detener los ataques de asma el mismo día que fue informado del aumento del precio del que usaba, con un copago de cinco dólares, y aseguró que el servicio de farmacia ofrecía “opciones disponibles clínicamente apropiadas” para cuando la medicación no está cubierta por un seguro de salud.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.