Sin bandera arcoíris y sin las siglas LGTBI+: el cartel del Orgullo 2024 de Madrid desata las quejas de las asociaciones

Sin mención alguna a las siglas del colectivo LGTBI+ y sin la bandera arcoíris. Así ha diseñado este año el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por el Partido Popular, los carteles con motivo del Orgullo LGTBI+ 2024 que colgarán a lo largo de estas semanas en las farolas y en las marquesinas de la capital. Una propuesta que no ha gustado a las asociaciones y que ha desatado la polémica en redes sociales por el uso de elementos que estereotipan al colectivo como tacones, condones o copas.

La presidenta de la Federación Estatal LGTBI+, Uge Sangil, mostró su rechazo este domingo a través de su cuenta de X (antes Twitter). “Parece que al Ayuntamiento de Madrid le siguen molestando los colores de la diversidad”, escribió, y protestó por el uso de “tacones, condones, copas y confetis” como símbolos representativos del colectivo. También la ministra de Igualdad, Ana Redondo, se sumó a las protestas por el cartel escogido a través de la misma red social. Redondo señaló que “el Orgullo no es una simple fiesta de confetis, tacones y preservativos”, sino que “es la reivindicación pacífica y respetuosa de los derechos de las personas LGTBI” y acusó al Partido Popular de “invisibilizar y denostar” al movimiento.

El alcalde madrileño José Luis Martínez Almeida ha defendido el cartel y ha asegurado que es parte de una “campaña festiva”. Ha explicado que las copas simbolizan la “fiesta” que es el Orgullo y para justificar los condones ha aludido al ministerio de Sanidad: “Condones son los que el ministerio de Sanidad ha acordado para las fiestas del Orgullo durante bastantes años para prevenir enfermedades de transmisión sexual”. Sobre los tacones ha añadido que aluden a la tradicional carrera de tacones que se celebra anualmente en el barrio de Chueca, donde los participantes corren en plataformas de hasta 15 centímetros de altura. “Yo puedo entender las discrepancias que haya sobre el cartel, lo que no puedo entender es que se diga que esto es LGTBIfobia porque esto es banalizar los delitos de odio”, ha anotado Almeida este lunes y ha insistido en que no hay “humillación ni intención de humillar”. Tanto el alcalde como el portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Madrid, Carlos Izquierdo, han acusado a Más Madrid y al PSOE de “politizar todo”. El Ayuntamiento de Madrid ha pagado casi 7.200 euros a la agencia de publicidad Una de Bravas por la campaña del Orgullo de 2024.

La polémica está servida para el pleno del Ayuntamiento de este martes, que ya tenía agendada una preguntas y dos proposiciones sobre el Orgullo. La portavoz socialista Reyes Maroto ha exigido a Almeida que “retire de forma inmediata” la campaña. “Reducir el orgullo a alcohol, fuegos artificiales, sexo y taconeo es una vergüenza y es ofensivo. Es nuestra opinión, es un caso de LGTBIfobia institucional”, ha dicho Maroto este lunes en rueda de prensa. El PSOE-M lleva una proposición para denunciar los “retrocesos” que supuso la modificación de las leyes regionales trans (2/2016) y LGTBI (3/2016) por parte del PP de la Comunidad de Madrid.

Por su parte, la portavoz municipal de Más Madrid, Rita Maestre, ha asegurado que la campaña vacía de contenido el Orgullo y lo caricaturiza. “Quiere convertirlo en un evento vacío que solo tiene una perspectiva comercial y turística”, ha criticado Maestre, que también ha solicitado la retirada de los carteles. Más Madrid, además, pedirá en el pleno que se suspendan temporalmente los niveles máximos de ruido durante la fiesta del Orgullo y que “se cree la figura del Comisionado del Orgullo LGTBI+ para coordinar las actuaciones del Ayuntamiento de Madrid”.

Todo ha ocurrido a pocos días del Día Internacional del Orgullo LGTBI+, que se celebra el 28 de junio, fecha en la que se conmemoran los llamados disturbios de Stonewall de 1969, cuando unas manifestaciones espontáneas respondieron a una discriminatoria redada policial en un bar gay del barrio neoyorquino. Las manifestaciones, sin embargo, se producirán en las distintas ciudades del territorio desde la segunda quincena de junio hasta finales de julio y la estatal, que tendrá lugar en Madrid, está prevista para el sábado 5. A la gran manifestación de la capital en 2023, asistieron 800.000 personas, según cifras de delegación de gobierno.

El año pasado ya hubo discrepancias entre las asociaciones del colectivo y el ayuntamiento de la capital por la no inclusión de la bandera LGTBI+ en la fachada del consistorio dirigido por el popular José Luis Martínez-Almeida. La insignia desapareció del edificio municipal cuando Manuela Carmena dejó el cargo. En 2023, también hubo críticas al cartel, que usó abanicos y claveles que, aunque eran de colores, no guardaban ninguna relación con los colores de la bandera.

Este año, Almeida ha vetado los conciertos del Orgullo Vallekano previstos para el 22 de junio, en los que iban a participar los grupos Genderlexx, Mucha Kiddo y L.S.D Dj, y ha alegado la “alta intensidad de eventos” que pueden causar molestias a los vecinos.

Madrid no ha sido la única ciudad en la que las asociaciones LGTBI+ están descontentas por la organización del Orgullo. En Valencia, la principal asociación que defiende los derechos y las libertades del colectivo, Lambda, ya se desmarcó de la preparación de los eventos por la falta de implicación del ayuntamiento de la ciudad, donde la alcaldesa del PP, María José Catalá, gobierna con el apoyo de la formación de extrema derecha Vox. El coordinador de Lambda, Fran Fernández, espetó hace tres días en una entrevista a EL PAÍS que “al PP le interesa del Orgullo LGTBI+ el turismo y la purpurina, sin ningún valor detrás”.