María Luisa Carcedo: “Se ha aprobado un derecho que nos hace más libres”
La exministra de Sanidad, ponente de la ley de eutanasia del PSOE, defiende que hay que aliviar el sufrimiento cuando no tiene remedio
La socialista María Luisa Carcedo (Santa Bárbara, Asturias, 67 años) ha conseguido como diputada lo que no tuvo tiempo de lograr en el año y medio que fue ministra de Sanidad: sacar adelante una ley de eutanasia a la que ya solo falta el trámite de su paso por el Senado. “Se ha aprobado un derecho que nos hace más libres”, repite durante la entrevista, el mismo argumento que usó en el debate parlamentario con los representantes de la derecha, UPN, PP y Vox, que tildaron la ley de eugenésica, ilegítima, asesina y otros calificativos. Al final la ley se aprobó por 198 votos a favor, 138 en contra y 2 abstenciones.
Pregunta. ¿Ha habido algo durante el debate que le haya molestado especialmente?
Respuesta. Lo primero que tengo que decir es que durante la tramitación ha habido una actitud muy positiva de la mayoría de los grupos, incluso cuando no aceptábamos las enmiendas. Pero el representante de UPN [Carlos García Adanero] ha dicho una cosa que no puedo pasar: que cuando alguien lo pasa mal, en lugar de ayudarle y darle los cuidados paliativos que necesita, lo empujamos al abismo. Y eso no se lo puedo tolerar. Soy médica y llevo 42 años trabajando por la salud, por ayudar, por el bienestar de la gente, y no me puede decir que lo que queremos es quitarlos de en medio.
P. ¿Y le ha sorprendido el apoyo de grupos más de centroderecha como el PNV o Ciudadanos?
R. La verdad que no. Todos han entendido que se trata de la defensa de un derecho, de la libertad individual.
P. La derecha se ha convertido en un adalid de los paliativos.
R. Sí, ya se lo he querido decir al portavoz del PP [José Ignacio Echániz], y le he recordado cuando acusaron a Luis Montes de practicar eutanasias en el Hospital Severo Ochoa de Leganés [en 2005], cuando lo que hacía eran sedaciones terminales. Entonces no les gustaban y ahora las reivindican.
P. ¿Tiene la sensación de que la ley ha llegado a la sociedad?
R. Yo creo que los medios le habéis dado mucha visibilidad.
P. Hay quien compara lo que significa esta ley con lo que implicó la del matrimonio igualitario en cuanto a avance en derechos.
R. Con la diferencia de que esta es una ley mucho más general, porque es para toda la población, aunque luego la usen colectivos muy reducidos. Es avanzar mucho en los derechos civiles y romper moldes del tipo de sociedad en que convivimos. Por eso la resistencia que ofrece la derecha. Como les he dicho en la sesión, siempre hacen lo mismo ante los avances: primero les hace tambalearse un poco, pero luego se calman y hasta los usan.
P. ¿Por qué ha sido tan visceral el debate?
R. Esta es una ley que está muy pegada a la condición humana. La muerte no es sino parte del ciclo de la vida, pero es penosísimo ver a las personas sufriendo. Y cuando ese sufrimiento no tiene remedio, no se puede condenar a alguien a pasarlo hasta que muera. O la situación terrible de las demencias, cuando te conviertes en un vegetal y pierdes toda integridad. No se puede hacer sufrir a la gente alargándole la vida si no puedes aliviarla.
P. Vox ha anunciado que recurrirá la norma ante el Constitucional. ¿Le preocupa?
R. Bueno, eso es casi lo esperado. Pero hay que ver lo que ha pasado en Canadá y Colombia. En los dos países, fue el Tribunal Constitucional el que, en respuesta a la demanda de un ciudadano, dio el paso de obligar a hacerla legal. Cada vez hay más apoyo. Hay una sentencia reciente del Constitucional alemán que dice que si una persona no quiere cuidados paliativos puede rechazarlos, que para eso tiene el derecho a decidir qué hacer con su vida. Hay avances que nos empujan en este sentido y no podemos ignorarlos.
P. ¿A usted como médica también le han pedido en alguna ocasión que acorte la agonía de un enfermo?
R. La verdad es que yo hace muchísimo que no ejerzo; llevo toda la vida metida en política. Pero lo que es cierto es que cuando un familiar de una persona con un cáncer complicado ve que le das tratamiento para que no sufra más, no saben cómo agradecértelo.
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