_
_
_
_
_
ANATOMÍA DE TWITTER
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Perro ‘sanxe’: guau, guau

Los ecos de la jornada electoral del domingo aún perduran en Twitter, sobre todo con los miles de viajeros de la alta velocidad afectados por una avería en el tramo Valencia-Madrid

Manuel Viejo
Pedro Sanchez Elecciones Generales
Pedro Sánchez celebra los resultados electorales en la sede del PSOE, este domingo en Madrid.Claudio Álvarez

Ya falta menos para que se hagan encuestas. Hay que hacer una, eso sí, sobre las encuestas que se hacen, pero solo a los que hacen las encuestas. Qué turra durante semanas, virgen santa. Y todo para que (casi) acierte el que falla siempre y erre el que daba en la diana (casi) siempre. España, vamos. Por si había poca división, el país se divide ahora entre michaviles y tezanistas. Qué noche electoral, la de nuestra querida España, esa España nuestra. Y qué mañana. Y qué tarde. Pues anda que el lunes en algunas tertulias… Lo suyo ahora es hacer más tertulias. Y también una encuesta sobre las tertulias, qué narices.

La jornada electoral de perro sanxeguau, guau– empezó con una teoría de la conspiración, como se inician las tramas de las mejores series. Conviene no olvidar que varios miembros del PP —acompañados de cierto tertulianismo patrio— alentaron la mañana del domingo en Twitter un plan maléfico por el cual los madrileños que tenían comprado un billete de AVE desde Valencia con destino Madrid —se entiende que solo la derecha coge la alta velocidad porque la izquierda va en Falcon y en biciclETA— no podían acudir a las urnas de la capital por una incidencia en un túnel. Hay tanta libertad en Madrid, pero tanta, tanta, que los votantes del PP se fueron a Valencia a buscarla el fin de semana. En fin. 14.000 viajeros fueron los afectados, según datos del ministerio de Fomento. Ni que decir tiene que si con el AVE a Valencia hay mala fe, con el tren extremeño… a saber lo que hay, y si lo hay.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

El caso es que el vicesecretario general del PP, el valenciano Esteban González Pons, escribió: “El Gobierno debe garantizar que la gente llegue a votar. Si ya eran unas elecciones como para no ir, faltaba esto”. Más tarde, a eso de la una de la tarde, añadió: “La bomba que ha causado el corte de la línea de tren Madrid-Valencia se incendió a las cuatro de la mañana. Es incomprensible que no haya podido ser restituida”. Al rato tuvo que borrarlo porque la única bomba era el tipo de arroz que se estaba cociendo en algunas casas valencianas. Se refería, dijo más tarde, a la “bomba de achique”. El senador popular Rafael Hernando, dicho sea, también se sumó al contubernio valenciano tuitero: “Tras el escándalo de Correos, ahora esto”. El escándalo de Correos fue tal, que se batió el récord de participación y no se habló del escándalo nunca más. Menos mal que no había carteros en la estación del AVE de Valencia.

Los pasajeros afectados por Renfe, por cierto, contaron con un plan alternativo desde primera hora, según se anunciaba en la propia estación y se explicaba también por los canales oficiales, pero algunos miembros del PP obviaron tal información. A saber los motivos. El domingo previsto comenzaba a ser imprevisto a partir de las nueve de la noche, ya sin encuestas, y en pleno escrutinio. Hay un vídeo de la Cadena Ser en los alrededores de Génova que resume bien lo que sucedió. Acumula ya más de un millón de visualizaciones. Aquí, el periodista de la radio, pregunta a un joven de unos 40 años, ataviado con una camisa verde oliva, y con música fiestera de fondo, qué tal veía el panorama de los resultados conforme iba avanzando el escrutinio. El hombre no tiene dudas. “Yo pensaba que iba a ver una victoria clara por parte de la coalición PP-Vox, pero no la ha habido. Lo que me hace sentir a mí… pues no te puedo decir gran cosa porque yo me he abstenido en esta ocasión”. España, vamos. Guau, guau.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Manuel Viejo
Es de la hermosa ciudad de Plasencia (Cáceres). Cubre la información política de Madrid para la sección de Local del periódico. En EL PAÍS firma reportajes y crónicas desde 2014.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_