Bolsonaro cuestiona el sistema de votación de Brasil ante los embajadores extranjeros

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, recibió el lunes en su residencia a unos 40 embajadores acreditados en Brasilia a los que había invitado para detallarles en persona su tesis de que el sistema de votación no es seguro y criticar de paso a las autoridades electorales. Quedan menos de tres meses para unas elecciones que se presentan especialmente tensas, en las que el ultraderechista se enfrentará a su predecesor Luiz Inácio Lula da Silva. El izquierdista se mantiene como claro favorito en los sondeos. El mandatario reiteró —sin pruebas, una vez más— sus ataques al sistema de votación con el que fue elegido presidente en 2018 y antes, diputado durante varias legislaturas. Nada más terminada la reunión, el Tribunal Superior Electoral remitió a los diplomáticos una respuesta punto por punto a las acusaciones de Bolsonaro.

“El sistema es totalmente vulnerable”, les dijo Bolsonaro a los diplomáticos, representantes de Estados Unidos, varios países europeos y el resto del mundo, que asistieron a una sesión inédita. La oposición y sus críticos sospechan que el presidente se empeña en sembrar dudas al estilo Donald Trump para cuestionar el resultado si pierde ante Lula en los comicios de octubre. Aún más inquietante, Bolsonaro quiere implicar a las Fuerzas Armadas en el recuento electoral.

Las acusaciones infundadas de Bolsonaro contra el sistema de voto electrónico brasileño son antiguas, pero en el último año las ha convertido en uno de los ejes de su campaña electoral. Lo llamativo, y lo que ha creado una gran polémica en Brasil, es que convocara a los embajadores para compartir con ellos sus críticas a un sistema de votación que en más de dos décadas no se ha visto afectado por irregularidades. Hasta la fecha no se ha confirmado ningún caso relevante de fraude.

“Sé que ustedes quieren estabilidad y esta solo será lograda con transparencia”, les dijo a los embajadores. El representante de uno de los países nórdicos declaró luego al diario Estadão: la presentación “no modificó nuestra manera de ver las cosas”. El diplomático recordó que “el sistema ha funcionado bien en los últimos 25 años” y añadió que considera el acto parte de la campaña electoral.

La sesión informativa organizada por el presidente se basó sobre todo en una antigua y conocida investigación policial sobre un ataque de piratas informáticos que entraron en 2018 en el sistema del Tribunal Superior Electoral, pero, según los investigadores, no modificaron los resultados. Su intervención, apoyada en un power point bilingüe con una falta de ortografía en inglés que hizo las delicias de los internautas, fue retransmitida en directo por redes sociales. Este martes por la tarde la habían visto más de 400.000 internautas y los comentarios rondaban los 52.000.

En un trino de Twitter, Lula ha acusado este martes a Bolsonaro de querer “crear confusión al estilo de Trump en EEUU”. El líder del Partido de los Trabajadores (PT), que lidera las encuestas con holgura desde hace meses, sostiene que el presidente de extrema derecha “está intentando engañar al pueblo para justificar cualquier tontería”.

En términos más duros se ha pronunciado el diario Folha de S. Paulo, uno de los principales de Brasil. En un editorial titulado Presidente golpista, acusa a Bolsonaro de “negociar con el Congreso la libertad para atacar a la democracia”, critica la complicidad de la Cámara de Diputados y del Senado y hace un llamamiento a la clase política: “La reacción contra la escalada subversiva del presidente de la República debe partir de la comunidad política. Todos los líderes de los partidos deben expresar con urgencia su aprecio por las reglas básicas de la democracia”.

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