La camisa mojada de Colin Firth en ‘Orgullo y prejuicio’ sale a subasta por más de 8.000 euros
La icónica prenda que hizo que el intérprete pasase de ser considerado un actor clásico a un ‘sex symbol’ es uno de los platos fuertes de la puja en la londinense Kerry Taylor Auctions, que incluye más de 60 disfraces de cine y televisión, como el traje de Madonna en ‘Evita’ o el de Johnny Deppy en ‘Sleepy Hollow’
Una de las escenas más memorables de Orgullo y prejuicio, la miniserie de 1995 que adaptó la BBC, es cuando Colin Firth (Grayshott, 63 años), que interpreta a Fitzwilliam Darcy, se sumerge en un lago y luego pasea por los campos con su camisa blanca chorreando agua, pegada a su torso. Es una escena completamente inventada que, en principio, nada tiene que ver con lo que Jane Austen tenía en mente cuando escribió la novela en la que está basada la serie. Pero esa camisa se quedó grabada en la mente de muchos espectadores, que ahora tienen la oportunidad de pujar por ella. Cosprop, una casa de disfraces fundada en 1965 por John Bright, diseñador y ganador de premios Oscar y Bafta, ha colaborado con la casa de subastas londinense Kerry Taylor Auctions para llevar a cabo Lights Camera Auction, una venta que incluye esta prenda entre más 60 disfraces de cine y televisión.
La camisa mojada de Colin Firth es uno de los platos fuertes y se espera que alcance entre las 7.000 y las 10.000 libras (entre 8.000 y casi 12.000 euros). “El momento de la camisa mojada de Darcy nunca estuvo escrito. Surgió en conversaciones entre el fallecido Christopher Prins, que entonces era jefe de moda masculina en Cosprop, y yo. En la escena se ve al señor Darcy saliendo de un lago después de darse un refrescante baño en un caluroso día de verano. Debido a que en la pantalla no se permitía la desnudez masculina, nació la idea de la camisa mojada. Nuestra solución fue filmar a Colin Firth saliendo del lago vistiendo solo la camisa de lino irlandesa (copiada de una original antigua) que se pegaba al cuerpo. La escena causó sensación en ese momento y transformó a Colin Firth de un actor clásico respetado a una especie de sex symbol de la noche a la mañana”, explica la diseñadora de la prenda, Dinah Collin, en la página web de la casa de subastas. En otro de los lotes, se subasta una foto de esta escena firmada por el propio actor, valorada en 200 libras (unos 234 euros).
No le falta razón a la diseñadora. La escena se volvió tan icónica que fue copiada por ejemplo en la serie de Netflix Bridgerton, cuando el actor Jonathan Bailey sale de un lago con su camisa blanca chorreando. El húmedo momento también fue referenciado en la película El Diario de Bridget Jones, que precisamente protagoniza Firth, encarnando a un personaje que se llama Mark Darcy, un guiño a su interpretación en Orgullo y prejuicio de la escritora Helen Fielding. Hasta se instaló una estatua gigante en honor a este momento en el lago Serpentine de Londres.
La subasta, que en su formato presencial se llevará a cabo este martes 5 de marzo en la sede de la casa de subastas en Londres y se ampliará en una versión online hasta el próximo día 10, incluye también otros trajes y objetos que vivieron su gran momento en la pantalla. Entre los artículos más valorados están un vestido de tafeta de Christian Dior vintage de la década de los cincuenta, usado por Madonna en la película Evita, de 1996 (podría conseguir entre 40.000 y 60.000 libras, es decir, entre 46.000 y 70.000 euros), y uno de los trajes de Johnny Deppy en Sleepy Hollow, que se espera que se venda por entre 20.000 y 30.000 libras (23.000 y 35.000 euros). La cinematográfica venta también cuenta con disfraces usados por Julie Andrews, Jude Law, Tom Hardy, Eddie Redmayne, Gwyneth Paltrow, Judi Dench, Ralph Fiennes, Scarlett Johansson, Nicole Kidman, Keira Knightley, Daniel Radcliffe, Alan Rickman, Margot Robbie, Drew Barrymore o Aidan Turner.
Los trajes han sido donados por Cosprop para recaudar fondos para la Bright Foundation, una organización benéfica de educación artística fundada por Bright. “Mi trabajo ha estado comprometido con el diseño de vestuario para el cine, la televisión y el teatro, y me siento increíblemente afortunado de haber podido seguir este camino. Creo firmemente que las artes y la creatividad pueden dar forma a niños más felices y saludables y permitir a los jóvenes alcanzar todo su potencial”, aseguró el diseñador al promocionar la subasta.
