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El Gobierno de Mazón cuestiona la normativa del valenciano y avala la “libertad” de Vox para usar las reglas que quiera

La Acadèmia Valenciana de la Llengua reivindica su autoridad reconocida en el Estatuto y acusa al Consell de “irresponsabilidad”

Carlos Mazón quita la oficina que recuperaba el dinero de la corrupción en la Comunidad Valenciana
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, en el Palau de la Generalitat, a principios de agosto.Biel Aliño (EFE)
María Fabra

Cumplir la normativa lingüística no es para el Gobierno de Carlos Mazón (PP) una obligación. El consejero de Educación, José Antonio Rovira, validó este jueves que el departamento de Agricultura, en manos de Vox, “tenga libertad para poder elegir sus normas” y escribir un valenciano no normativo, con faltas ortográficas. Este viernes, fuentes de la Presidencia del Consell han respaldado su consideración: “Rovira es el Consell”. De esta manera, el Gobierno valenciano cuestiona la autoridad de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) que ha acusado, a través de un comunicado, al Ejecutivo de PP y a Vox de “irresponsabilidad”.

La AVL se creó en 2001, bajo el mandato del entonces presidente de la Generalitat valenciana, Eduardo Zaplana. En 2006, el Estatuto de Autonomía (sin votos en contra en las Cortes Valencianas) reconoció a la academia como el único organismo competente en la regulación de la lengua valenciana y dictó que “las decisiones de la AVL deberán ser observadas por todas las instituciones de la Generalitat, por los poderes públicos, por el resto de administraciones públicas, el sistema educativo, los medios de comunicación, las entidades y los organismos y empresas de titularidad pública o que cuenten con financiación pública”.

La polémica de estos días comenzó con un mensaje en la red social X (antes Twitter) del departamento de Agricultura, en manos de Vox. “José Luis Aguirre analisa en el Grup Tragsa l´eixecució de proyectes en marcha”, decía el tuit. La redacción correcta, de acuerdo con las normas de la AVL, es: “José Luis Aguirre analitza amb el grup Tragsa l’execució dels projectes en marxa”.

Ante la avalancha de reacciones por el uso de un valenciano ajeno a las normas, la consejería borró el tuit, pero este ya había desencadenado las críticas de los socialistas valencianos y de Compromís, la social de varios colectivos en defensa del valenciano y, este viernes, la de la Acadèmica Valenciana de la Llengua, después de que el PP defendiera que el consejero de la extrema derecha puede utilizar las normas lingüísticas que quiera. Para la academia, “proyectar la idea de que puede haber más de una normativa lingüística es completamente improcedente y está alejado de los objetivos que debe perseguir un Gobierno”. “Cualquier intento de apartarse de lo que prescribe el Estatut comportaría una irresponsabilidad y un gran perjuicio para la sociedad valenciana y para la normalización de la lengua propia”, señala la AVL en su escrito. “Cualquier fragmentación o diversificación de la norma lingüística está fuera del sentido común, fuera de una visión de futuro y fuera del sentido institucional que esperemos de nuestros gobernantes”, añade.

Pese al consenso alcanzado en el pasado con la Acadèmia Valenciana de la Llengua, el PP siempre ha flirteado con la Real Academia de Cultura Valenciana (RACV), otra entidad pública que sigue unas normas al margen de las aprobadas por la AVL —el organismo cuya autoridad, según el Estatuto, hay que respetar— y que defiende el secesionismo lingüístico del valenciano frente al catalán, otorgándole millones de euros en subvenciones.

La posición del PP resulta paradójica después de que, tras el anuncio de la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, de permitir el uso del catalán, el gallego y el euskera en la Cámara, el Gobierno de Mazón exigiera para el valenciano el mismo estatus que para el resto de lenguas cooficiales. La Acadèmia Valenciana de la Llengua aprobó en 2005 un dictamen en el que señalaba que valenciano y catalán son la misma lengua: “La lengua propia e histórica de los valencianos, desde un punto de vista de la filología, es también la que comparten las comunidades autónomas de Cataluña y de las Islas Baleares y el Principado de Andorra”, indica el informe. Por ello, el líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, negoció con Armengol incluir la denominación de catalán/valenciano junto a la de catalán, al igual que actualmente está establecida en el Comité Europeo de las Regiones.

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Carlos Mazón se ha referido a esta última cuestión este viernes en una entrevista en COPE Alicante recogida por Europa Press. En ella ha defendido que el castellano es la lengua “más adecuada” en el Congreso de los Diputados, ya que se le “antoja complicado” plantear la incorporación de traductores para permitir el uso de todas las lenguas cooficiales pero ha exigido a Francina Armengol, al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y a los ‘expresidents’ de la Generalitat que citen al valenciano cuando hablen de lenguas cooficiales. “Si no se cita al valenciano, se está incumpliendo la Constitución y el Estatut d’Autonomia y se está haciendo el juego a estos del procés”, ha dicho.

“¿Si el presidente de la Generalitat no respeta el Estatut, quién lo va a hacer? Yo respeto el Estatut, y el Estatut dice que nuestro nombre es Comunitat Valenciana y nuestra lengua cooficial es el valenciano (...) Esto no es opinable, es que no es así”, ha dicho Mazón al que no se le ha preguntado por la polémica del valenciano normativo.

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