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La Cambra considera insuficiente la política de “desalinización y reutilización” contra la sequía

Su presidente Josep Santacreu reclama la interconexión de agua del Ebro con Barcelona

Sequia Cataluña
El río Ebro a su paso por Miravet, el pasado verano.GETTY IMAGES
Dani Cordero

La Generalitat cuenta básicamente con tres estrategias para luchar contra nuevos episodios de sequía como el que este jueves le obligó a activar la fase 1 de emergencia. Reducción del consumo, desalinización del agua del mar y reutilizar los recursos hídricos que salgan de las depuradoras. La Cámara de Comercio de Barcelona cuestiona esa estrategia y advierte al Govern de Pere Aragonès que apueste también por la interconexión del río Ebro con el sistema Ter-Llobregat, el que abastece a seis de los ocho millones de habitantes de Cataluña. No es la primera institución que clama por esa tubería. En diciembre ya lo hicieron cuatro colegios de ingenieros. Y ayer la respuesta del Govern fue la misma que entonces: No.

El presidente de la Cambra, Josep Santacreu, advirtió que con el cambio climático Cataluña se dirige hacia un problema estructural de agua y advirtió que, si bien el origen está en el calentamiento global, el problema de Cataluña es el cúmulo “de un déficit clarísimo de decisiones y un retraso de más de una década”, en referencia al aviso que ya dejó en tierras catalanas la gran sequía iniciada en 2007. Y considera que las nuevas medidas por las que está apostando el Departamento de Acción Climática no colmarán las necesidades de Cataluña: “La estrategia centrada en desalinizadoras y reutilización de agua está bien pero no es suficiente”, dijo Santacreu, quien llamó a modernizar el modelo industrial y agrícola y pidió realizar una interconexión que permita conectar el Ebro con la gran región metropolitana de Barcelona. Preguntado al respecto, evitó hablar de trasvase, cuya decisión dejó para momentos posteriores.

El sentir expresado por los ingenieros es que la interconexión permitiría aprovechar los excedentes hídricos de cada sistema hídrico en las dos direcciones. La realidad es que ahora el río Ebro muestra un brioso caudal mientras que los embalses de las cuencas internas de Cataluña muestran el terruño agrietado propio de largos periodos de tiempo sin precipitación. “Si el balance entre el coste de la inversión y los beneficios es positivo, creo que está más justificado en un momento tan crítico como este”, defendió el presidente de la Cámara de Comercio, quejoso con la dilación en la toma de decisiones: “No tendríamos que llegar a estas medidas extremas para tomar decisiones. Santacreu asumió que incluso la Cambra llega tarde al debate y que una comisión preparará un monográfico sobre el tema. Su jefe del gabinete de estudios, Joan Ramon Rovira, admitió que los efectos de la sequía, sobre todo por su afectación sobre la agricultura y la industria alimentaria, impactará en la actividad económica de Cataluña, cuyo PIB la entidad prevé que crezca este año un 1,8%.

La Generalitat se ha marcado como objetivo generar 182 hectómetros cúbicos de agua para el consumo con sus medidas: 80 hm³ de la desalinización; 56 hm³ de la reutilización y mejoras en plantas potabilizadoras; 6,3 hm³ en mejoras de eficiencia de la red, 15 hm³ de recuperación de pozos y 25 hm³ para intensificar el aprovechamiento del río Besòs. En paralelo, se prevé pasar de las 24 instalaciones de regeneración de agua actuales a 40. Se recuperarán 120 hm³ a través de la regeneración, 50 hm³ más que ahora. La Generalitat calcula que un millón de hectómetros cúbicos es el consumo diario que realizan 7,5 millones de habitantes. Ayer los embalses tenían apenas 109,41 hectómetros cúbicos, el 15,75% de su capacidad y por debajo del 16% que obligaba a declarar la emergencia.

Pimec, la patronal de pequeñas y medianas empresas, respondió a la entrada en emergencia en Barcelona y Girona con la petición de ayudas para las empresas afectadas por las medidas de la emergencia, ante el temor de que estas provoquen “cierres de empresas, destrucción de puestos de trabajo y pérdida de la capacidad de creación de riqueza”. Las empresas más afectadas por la sequía se encuentran en el sector agrícola, ganadero, algunos sectores industriales como el agroalimentario, químico, farmacéutico, papelero y textil y algunos servicios a las empresas como las lavanderías industriales y actividades acuáticas.

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Sobre la firma

Dani Cordero
Dani Cordero es redactor de economía en EL PAÍS, responsable del área de industria y automoción. Licenciado en Periodismo por la Universitat Ramon Llull, ha trabajado para distintos medios de comunicación como Expansión, El Mundo y Ara, entre otros, siempre desde Barcelona.

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