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Jaume Collboni ofrece a los empresarios de Barcelona “restablecer la confianza que la ciudad necesita”

El alcalde asegura en el Círculo de Economía que ambiciona que regresen las empresas que se marcharon durante el ‘procés’

Clara Blanchar
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, entre su número dos, Laia Bonet, el CEO de Seat, Wayne Griffiths, y el teniente de alcalde Jordi Valls.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, entre su número dos, Laia Bonet, el CEO de Seat, Wayne Griffiths, y el teniente de alcalde Jordi Valls.AYUNTAMIENTO DE BARCELONA (AYUNTAMIENTO DE BARCELONA)

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni (PSC), se estrenó este martes en su primera conferencia como alcalde en el Círculo de Economía, que reúne a directivos y empresarios de Barcelona y que actualmente preside Jaume Guardiola. Collboni, a quien se vio cómodo y seguro, lanzó varios mensajes ante los 200 asistentes: quiere y ofrece “restablecer la confianza que Barcelona necesita”, recuperar el “diálogo institucional” con sindicatos y patronales, y “ambicionar tener poder económico para que vuelvan las empresas que se marcharon por el procés, independientemente de lo que uno piense”. El alcalde definió su gobierno como progresista, aunque se abrió a llegar a acuerdos con el grupo de Junts que lidera Xavier Trias, y aseguró que trabaja con “la máxima ambición”, apoyado con una sólida estructura gerencial. También mantuvo que “Barcelona no estará sujeta a ninguna coyuntura política” y que habrá mirada larga. El edil dijo que será “el alcalde de todos” y que tendrá lealtad institucional con todo el mundo: “Espero que esto no sea noticia”.

Collboni insistió mucho en la idea de “generar confianza, rebajando la crispación, intentando buscar acuerdos, resolver problemas de la ciudadanía y fomentando la cooperación público-privada”, dijo con alusiones veladas a su antecesora y líder de los comunes, Ada Colau. “Ofrecemos confianza, soluciones sin reproches ni hacer de la confrontación una forma de hacer política”, repitió ante los asistentes. Con todo, afirmó: “Lo que ha funcionado del anterior gobierno de coalición lo mantendremos”, citando el plan económico Barcelona Green Deal, o proyectos como el 22@ norte, la reindustrialización del Besòs o la vuelta de la economía a Ciutat Vella. “Barcelona tiene que decir que sí, o explicar por qué dice que no”, destacó sobre la implantación de nuevas empresas, sedes o inversiones “para generar oportunidades para nuestra gente”. “Hay que ir a por todas”, resumió. Hace ocho años, cuando Colau acababa de llegar al poder, su mensaje a los empresarios durante una conferencia en la Cámara de Comercio fue que defendería el liderazgo público de la economía.

Durante dos horas, los representantes del Círculo que intervinieron aplaudieron en general su gestión y “cambio de talante”; y en particular su idea de flexibilizar la imposición a los promotores de destinar un 30% de los pisos que construyen a vivienda social; pero le reprocharon la regulación del alquiler que prevé la Ley de Vivienda impulsada por el gobierno de Pedro Sánchez. “Si no hacemos nada, continuarán subiendo los precios y el acceso a la vivienda está siendo la principal fuente de desigualdad”, respondió el socialista, lamentando que en Barcelona se llegan a pagar 600 euros por una habitación. “La no regulación ha disparado los precios”, advirtió, aunque admitió que los constantes cambios legislativos “generan inseguridad jurídica”.

“¿Y de pactos?”, preguntó alguien del público sin presentarse y con el ex alcalde Xavier Trias y ahora jefe de la oposición en las primeras filas. Collboni respondió afirmando que su gobierno es “progresista y con un programa progresista”, que fue investido “mayoritariamente por un partido progresista [los comunes], y que la ciudad votó “mayoritariamente progresista”. Dicho esto, se abrió a pactar “acuerdos concretos, de gobernabilidad o presupuestarios” con Junts, con quien “hay coincidencias programáticas”. “Veremos cómo van las cosas, no hay que demorarlo mucho, pero tampoco hay prisa”, convino y recordó que también hay negociaciones pendientes en Madrid.

“El Pla Endreça no es la política más sexy, pero es la básica”

Sobre la gestión en sus primeros 100 días, defendió su Pla Endreça [poner en orden, en catalán], basado en la limpieza y la seguridad. “No es la política más sexy para comenzar el mandato, pero es la básica”, afirmó. También recordó que la vivienda será su prioridad y que que quiere flexibilizar la imposición a los promotores de destinar el 30% de los pisos que construye en solares de la ciudad ya construida a vivienda social.

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Antes, anunció que el día 22 de noviembre reunirá a los principales sindicatos y patronales (CC OO, UGT, Pimec y Fomento del Trabajo) para impulsar el “diálogo social Barcelona”, sin más concreción. Collboni también anunció que el Ayuntamiento triplicará la aportación a sus dos fondos de inversión, pasando de 20 a 60 millones de euros: “Es mandar el mensaje de que queremos escalar la iniciativa público-privada”.

La ampliación del aeropuerto de El Prat apareció también en el coloquio posterior a la conferencia. “El debate está mal planteado, porque primero hay que hablar de qué modelo queremos: la economía diversificada y basada en el talento necesita que la ciudad esté interconectada con los centros de producción de talento del mundo, en Boston, Shanghai, la India o Toronto”, defendió el alcalde. Sobre el turismo, el alcalde ha defendido el sector, pero “con control”.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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